El que hace el mal no comprende que en primer lugar y por encima de todo se está haciendo daño a sí mismo, porque sufre de amathia, falta de conocimiento de lo que es realmente bueno para él. Y lo que es bueno para él es lo mismo que es bueno para todos los seres humanos, según los estoicos: aplicar la razón para mejorar la vida social. En lo que se refiere al resto de nosotros, recordar que la gente hace cosas malas por falta de sabiduría no solo es un recordatorio para ser compasivos con los demás; también nos dice constantemente cuán importante es aumentar la sabiduría.