sus trabajos están impregnados de fiebre polémica, irreverencia contra lo establecido, una creatividad intelectual que coincide con cierta fría rigidez analítica y, a menudo, de propuestas explosivas como la que hizo en 1950 de que Alemania Occidental se integrara a Estados Unidos y que luego otros países europeos la imitaran (pensaba sobre todo en los países escandinavos).

