El evangelio (las buenas nuevas de Jesucristo) es el instrumento de Dios para llamarnos y traernos a nueva vida y unirnos con Cristo por medio de la gracia (Ef. 2:5). Es un llamado que nos habla en nuestra esclavitud y ceguera a causa del pecado. Y es un llamado hacia una relación renovada con el Dios que nos creó.