Él no nos pidió que nos comparáramos con otras personas, ni que corriéramos la carrera de otro. Él simplemente nos dijo: «Corre tu carrera». Punto.
DIOS nos ama tanto que el quiere que nos amemos a nosotros mismos, sin compararnos con los demas, viviendo todos los dias comosi fuera el ultimo. Debemos andar de la mano con Dios que es el unico que nos ayuda en nuestra batalla contra el rechazo.

