—Hola, familia. ¿Qué tal, cuñada? —me pregunta guiñándome un ojo—. Me han dicho que han descubierto vuestro encantador romance. —¿Tú lo sabías? —le pregunta mi hermano. —¿Tú no? —le responde con fingida superioridad. Daniel gruñe. —¿Desde cuándo lo sabes? —le pregunta mi hermano Alex a Nick. Ninguno nos esperamos lo que dice a continuación. —Desde —mira al techo mientras piensa— septiembre de 2001. Sí, eso es. Sucedió una noche en las pizarras del Crowden. ¿Queréis que os cuente la historia? Se acerca a mi lado y me da un beso en la cabeza. —Bienvenida a la familia.

