Y la atmósfera en un momento determinado se volvió tan frágil, tan sostenida por agujas, que yo pensé estos pendejos deben saber algo que yo no sé, aquí pasa algo raro, no es normal que el pinche camión circule como una sombra por las calles del DF, no es normal que no se suba nadie, no es normal que sin venir a cuento me ponga a alucinar.