Se dice por allí que los hombres y las mujeres, de hecho, podrán llegar al cielo sin todas estas dificultades, guerras y luchas. Préstenme atención por unos minutos y les mostraré lo que tengo que decir en nombre de Dios. Recuerden la máxima del general más sabio que jamás hubo en Inglaterra: “En tiempo de guerra el peor error es subestimar al enemigo, y tratar de librar una guerra pequeña”. La guerra cristiana no es algo de poca importancia. Denme su atención y consideren lo que digo.