en vano es que alguien suponga que puede tener un sentido vivo de su justificación o de una seguridad de su llamado, mientras, por otro lado, descuida las buenas obras o no se esfuerza por vivir una vida santa. “Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos”. “Y en esto conocemos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros corazones” (1 Jn. 2:3; 3:19). Así como el creyente no puede esperar sentir los rayos del sol en un día oscuro y nublado, tampoco puede sentir la fuerte consolación en Cristo, si no lo sigue plenamente.