Cuando te encuentras en un estado de gratitud, le transmites al campo la señal de que esta situación ya ha ocurrido. La gratitud no es tan sólo un proceso mental intelectual. Debes sentir como si lo que deseas ya existiera en tu realidad en este instante. Tu cuerpo (que sólo entiende los sentimientos) debe estar convencido de estar experimentando el resultado emocional de la situación futura.