Santiago

59%
Flag icon
cuando el coronel Aureliano Buendía lo invitó a promover una conflagración mortal que arrasara con todo vestigio de un régimen de corrupción y de escándalo sostenido por el invasor extranjero, el coronel Gerineldo Márquez no pudo reprimir un estremecimiento de compasión. —Ay, Aureliano —suspiró—, ya sabía que estabas viejo, pero ahora me doy cuenta que estás mucho más viejo de lo que pareces.
Cien años de soledad
Rate this book
Clear rating
Open Preview