Naird

19%
Flag icon
Pero ¿cuánto tiempo llevaba Huebo empujando un puesto de pudin por delante de él como un quitanieves? ¡Madre mía, pensó Trev, he encontrado a un jugador! ¿Cómo ha podido hacerlo? ¡Si parece un muerto de hambre!
El atlético invisible
Rate this book
Clear rating
Open Preview