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January 17 - February 7, 2023
Todavía no se ha escrito el libro que analice el efecto del tiempo inclemente en las obras de ficción británica. La isla del tesoro, como Frankenstein de Mary Shelley, fue el producto de unas vacaciones de verano muy lluviosas en las que no se podía hacer otra cosa que quedarse en casa contando cuentos junto a un fuego bien caliente impropio de la estación.
no tardó el áncora en quedar izada y chorreando en las amuras, al tiempo que se hinchaban las velas y la tierra y las demás embarcaciones pasaban por nuestros costados; y antes de que pudiera echarme para dormir una horita, la Hispaniola había comenzado ya su viaje rumbo a la isla del tesoro.
Pues bien, lo que voy a decirte es que jamás he visto que del bien salga algo bueno. El que golpea primero es el que lleva las de ganar; los muertos no muerden; esas son mis creencias... ¡amén!
Cualquiera puede escribir un relato breve —uno malo, quiero decir— si tiene dedicación, papel y tiempo suficiente, pero no todo el mundo puede aspirar a escribir siquiera una mala novela.