En primer lugar, se trata de ayudar a las personas a aprender a controlar su egoísmo e inclinar su corazón a preocuparse más por los demás. En segundo lugar, se trata de ayudar a las personas a encontrar un propósito, para que su vida tenga estabilidad, dirección y significado. En tercer lugar, se trata de enseñar las habilidades sociales y emocionales básicas para que uno pueda ser amable y considerado con las personas que lo rodean.