La alimentación es solo una de las muchas facetas de la crianza, y mientras el acto de alimentar, ya sea con pecho o biberón, sea un momento de conexión y amor, la elección es adecuada. Ninguna madre o padre debería sentirse menos capaz o comprometido por la decisión de alimentación que tome. Toda elección hecha desde el amor y el deseo de lo mejor para el bebé según tus circunstancias personales es válida.