More on this book
Community
Kindle Notes & Highlights
Dime si no es una belleza. ―Por supuesto que lo es. ―Me mira a mí e inspira hondo por la nariz―. Ahora te agradecería que apartaras tus manos de mi esposa.
Eres una mujer valiente, apasionada y poderosa, pero por alguna razón te empeñas en usar una máscara para ocultarlo de los demás.
―No dejas de pedirme que sea yo misma, sin máscaras. Pues bien, esta soy yo. Peleo si creo que debo hacerlo y no salgo corriendo cuando las cosas se complican.
. Tú no solo tienes mi permiso. A ti te deseo sin limitaciones. Quiero que me demuestres que no estoy rota. ¿Harías eso por mí?
―Mía ―gruño, atrayendo todas las miradas. Me muevo rápido, me quito las gafas y las lanzo sobre mi hombro, rodeo la mesa y en solo un pestañeo tengo al puto Karaj sujeto por el cuello―. Es mi chica. Mi. Maldita. Mujer. ¿Lo has entendido o tengo que grabártelo en la puta frente con el cortaúñas de tu amigo?