More on this book
Community
Kindle Notes & Highlights
aquí el que no tiene alias es porque no lo quiere nadie.
¿Qué sentimiento requiere su ausencia para disminuir la incompletud que dejaron? Pesar, aflicción, molestia, ira, culpa, gratitud, amor, ¿todos juntos?, ¿qué hacer para atajar el brote de dolor inmenso que siento adentro? Son preguntas inertes, desesperadas e inútiles, proyecciones de mi mente atribulada que combina la negación con la congoja.
Era una casa de apariencia pobre y fea aunque con una belleza íntima como el dibujo de un niño al que le falta destreza pero tiene talento porque a las casas como a las gentes nos definen los interiores.
vivir es alimentar de muertes a la muerte,
en un país de malos padres y malos tratos el maltratador es rey, nunca educó, ni acompañó, ni propició, ni otorgó nada a sus hijos, pero los castiga cuando estos intentan conseguirlo, los tilda de necios, indispuestos, desobedientes y malos hijos, creando una familia de hambrientos rabiosos que muerden al vecino o al amigo que obtuvo un mendrugo de pan, o de famélicos corpóreos y mentales que se contentan con las sobras del banquete principal al que nunca están invitados;
él siempre miraba con desconsuelo, a veces me convidaba, supongo que para escudarse en la compañía de un amigo y esquivar los ojos inquisidores de los vecinos, que es para lo que servimos en momentos de angustia, para apoyar las vergüenzas que al otro le cuesta cargar solo;
si algo hicieron bien los bandidos en nuestra ciudad fue que nos endilgaron su modo de vida y su desparpajo como aspiración hasta hacerlo cultura, dejaron ese brote que fue convirtiéndose en maleza e inundó todas las capas de la sociedad hasta hacerse paisaje, tejieron con su ejemplo un manto con el que todos nos cubrimos desde esa época y para siempre, volviéndonos una colectividad deseante, impenitente, que vuelve cualquier forma de ascensión social la única razón de la existencia, sin importar a quien tengamos que empujar, tumbar, embadurnar o quitar del medio para conseguir esa promoción.
«Hay cosas para ricos o para pobres, no para todos», solo que las de los pobres los ricos las pueden tener y no quieren, y las de los ricos los pobres las quieren tener y no pueden,
Faltarían algunos años y otros tantos daños para entender que la malquerencia es una muerte en vida, y que es peor porque el asesino y la víctima siguen vivos y cocinándose en odios implacables y mortales idénticos al amor que se tuvieron,
la pena hablando con quien quisiera escucharme hasta que advertí que las penas nunca pasan, solo se estancan en una quietud lóbrega cebada en silencio porque ellas son en sí mismas estridencia ensordecedora, grito total y acuciante que no debe contaminarse con otras voces,
la muerte es caprichosa, perra y mala en sus actuares, que cuando afila su guadaña se lleva lo que tenga por delante sin importar qué se haga para evadirla, porque somos los juguetes con que embolata su tenebrosa perpetuidad inmortal.
hablábamos de cualquier cosa con tal de tapar con palabras la realidad que se nos había hecho palpable de golpe.
la falta de actividad aceleraba su deterioro, un hombre como él, que había empezado a trabajar a los siete años sin detenerse nunca, porque fue de esa generación de hombres bravíos de campo que aprendieron solo a trabajar como mulas sin descanso desde chiquitos, sin vacaciones y sin conseguir nunca más allá del sustento diario, hombres que nunca se quejaron y que encontraron en el trabajo rudo su sostén y hasta su diversión, a los cuales este país goza produciendo porque sabe que con ellos tiene garantizado el trabajo bruto y barato, por eso no los educa, no los alienta, ni los impulsa, antes
...more
La vida que es tan perra a veces se conmueve con los deseos auténticos y pone al deseoso en la vía de su destino, valiéndose de tretas calculadas y precisas que los más optimistas llaman casualidades y que no son más que la manera con que esta condena al ser humano a morir por sus deseos;
nunca nos damos cuenta de las cosas importantes hasta que dejan de serlo, ya qué me puede importar el cómo cuando me urge el cuándo, y solo quisiera que al final de sus ojos le llegara un mínimo destello de los míos que le hiciera saber cuánto lo quiero, por eso me le acerco y sin decirle nada pongo mi frente encima de la suya.
cuando lo conocí como uno de los Sanos el día de mi primer baile de baladas con mi inaugural novia era un muchacho extraño, y tiempo después entendí que la extrañeza era la libertad que en esa época y edad no supe entender; para todos, incluidos sus amigos los Sanos, Byron era un raro, que es como la sociedad llana y procaz llama despectivamente a lo que no entiende, a lo que no se adapta a los códigos estipulados vaya a saberse por quién y en los que todos coincidimos como normalidad.
la música nos determina, nos resuelve y nos concreta cuando la escuchamos con la devoción del creyente, trascendiendo la naturalidad del simpatizante y que su compañía abriga y protege y nos ayuda a ser la mejor versión de nosotros mismos cuando entramos en ella con respeto y humildad,
Hermano, ojalá Byron se encuentre en la música, que la escoja como camino, sería hermoso, una recompensa a tanta tristeza, la música lo va a salvar, no de sufrir, de eso nada nos salva, pero sí le va a dar la fuerza para resistir la vida, para aguantar los malos trances sin volverse un resentido ni una mala persona, ya tiene en qué descargar sus dolores sin hacerle daño a nadie, y eso es más de lo que muchos pueden tener y lo único que yo como padre puedo desear para él, que tenga a la música en su vida me deja tranquilo y feliz,
Empecé a llorar porque el gvn dijo las mismas palabras que mi cucha cuando le propuse vender todos mis instrumentos para tener platica para tratar el cancer
Samuel liked this
Ay, mijo, se puede vivir de muchas maneras y entiéndame bien la obviedad, se vive viviendo, solo eso, con hambre o llenos a todos nos amanece el siguiente día, lo importante es saber por qué se vive, el cómo viene con los vaivenes del tiempo, el dinero va y viene y de verdad con la edad lo he comprobado, eso que al parecer es tan importante para la sobrevivencia carece de sustancia,
de transitar los días con las pequeñas necesidades no hay que preocuparse porque como sea pasan, con abundancias o escaseces igual pasan, y más en este país donde todos terminamos comiendo mierda, lo único que podemos hacer es escoger en qué vasija queremos servirla, y el arte y la música son los recipientes más nobles que conozco.
la indiferencia del ofendido es peor que cualquier venganza, porque trae en su seno la carencia absoluta de afecto que se requiere para llevar a cabo un recobro.
lo que se sabe viajando y es que el mundo es uno y enorme y que las fronteras están en la cabeza y son políticas, porque lo humano es universal y nos emparenta en cualquier parte del mundo desde el espíritu infinito y eterno,
aquel que emprende la huida nunca puede detenerse y que las faltas siempre se pagan
en este país de almas en pena donde los muertos, por ser tantos, se mueren del todo por falta de quien los recuerde.
al final cuando fui a que mi mamá aprobara mi atuendo —un impulso amén de infantil, inútil, ya que nuestras madres son el peor juez, el más parcial de todos, porque para ellas sus hijos son los más lindos, los más dotados y la suma máxima de la perfección en todos los aspectos, lo que nos ha creado un sentimiento de superioridad y falsa grandeza que choca infaliblemente con la idea real que el mundo tiene de nosotros, golpeándonos en la cara cuando salimos a la vida habiendo dejado atrás las cuatro paredes uterinas de nuestra casa y enfrentamos que somos feos, malos y torpes en casi todo y que
...more
hay roles en la vida que vienen dados de antemano, que no se aprenden, se tienen o no, se nace con ellos, no se entrenan, no se estudian, no se ensayan, simplemente son y ya,
a veces atraemos los problemas por presentarnos a la vida en pendencia, y cualquier situación por simple que sea termina embrollada porque la contrariedad la llevamos nosotros;
La sociedad nos asigna unos roles dependiendo de nuestras capacidades aparentes, no de nuestras aptitudes reales, a la manera de los que reparten a los jugadores en los picaos de barrio, que los escogen atendiendo únicamente a lo que resalta a simple vista: los altos y de mejor talla van a la defensa, los minúsculos y rápidos, a la delantera, los más cerebrales, al medio campo, y el gordo siempre de arquero, algunos asumimos que ese era nuestro destino y por pura comodidad nunca probamos una posición diferente, la realidad es un repartidor infame que siguiendo esta misma lógica nos asigna unos
...more
a Colombia no lo mataron los Pillos que halaron el gatillo, sino que lo mató el barrio entero y la necesidad de cobrar el peaje de superioridad moral que se endilga como sustento esta sociedad hipócrita, pacata y violenta,
los días de fútbol se volvieron una fiesta que alcanzó su máximo esplendor un miércoles de mayo de 1989 cuando el Atlético Nacional conquistó el triunfo en el certamen internacional más importante del continente: la Copa Libertadores de América. Desde esa noche nuestra relación con ese deporte se transformó, se exacerbó en todos los sentidos, los entusiastas del Nacional se hicieron más frenéticos y arrogantes, los que no teníamos interés particular en ningún equipo arribamos nuestra simpatía al campeón porque no hay nada que atraiga mayor favoritismo que las victorias y más en una sociedad
...more
Soy mejor enfrentando el sufrimiento propio que el de las personas que quiero, este me supera, me sofoca de impotencia, me desequilibra por no poder hacer nada, el dolor propio endurece el carácter, afina la condición y modela el temple o destruye al que se deje, pero la aflicción ajena cuando el ajeno es tan de uno me entiesa, me pasma, me agobia y me desnutre, nunca he sido capaz de ver sufrir a los míos sin sentir la incompetencia del que se muere de hambre por no tener boca, me invade una culpa sorda y molesta que me susurra más adentro del oído y del cerebro, imputándome que algo en su
...more
El amor es perro a veces y, después de mostrarnos su dulzura sin par durante un largo tiempo, instala de un momento a otro su corrosión mortal, sin aviso, sin retorno y sin que podamos entender su tránsito de un estado al otro, porque los síntomas estaban disfrazados de connivencia cotidiana y solo aparecieron como tales cuando ya eran enfermedad incurable.
Esa precisamente es una de las primeras cosas en las que interviene la religión para conseguir adeptos: insufla un sentimiento de superioridad moral en sus miembros que los hace juzgar a los demás como inferiores por no compartir sus más primarios temores, expresados en bisutería ideológica contra el cuerpo y las libertades civiles.
cada persona busca el engaño que mejor le parezca,
No sé qué cosa sea Dios y desconozco dónde se encuentra, pero sí estoy seguro de que no es en una iglesia, y mucho menos en los corazones de los hombres.
La vida de un hombre es insignificante en realidad, aunque tiene dos o tres ocasiones que la dignifican y le dan sentido, solo que no sabemos qué son cuando ocurren, sino mucho después cuando las contemplamos desde la distancia y con la pátina indulgente de los años, por lo tanto somos melancólicos y anacrónicos y vivimos de un pasado que ni siquiera sabemos si fue real o si nuestra mente profiláctica limpió de bajezas.
Vivir es aceptar que a las personas nos pasan unas cosas buenas y otras malas; no es la energía ni el aura ni ninguna de esas puerilidades del crecimiento personal y la demagogia existencial, que venden el bienestar como un producto y no como un resultado,
La belleza trae consigo poder, un poder no pedido ni merecido que no responde al esfuerzo ni a la maquinación, pero poder al fin y al cabo, y como tal trae compromisos y estos, aunque tampoco fueron pedidos, hay que cumplirlos porque el poder es implacable con el anarquista y el desobediente, y siempre cobra los dones conferidos.
Esa muerte reconfirmó una vez más que la violencia es la negación absoluta de la belleza, y que la belleza en una sociedad tan fea es una maldición.
Creo que los que se van lo hacen buscando lo que su corazón reclama como felicidad cuando su entorno no se las brinda y que todo el mundo debe estar donde encuentre la pega para juntar los retazos de su propia felicidad; los que parten lo hacen buscando esa pega que el país no les da ni les permite buscar, sino que antes les frena los deseos que palpitan en sus almas; si ansían alta cultura se van a encontrarla en Italia o Francia, si anhelan civilización se van a Australia o Nueva Zelanda, si ambicionan aventura, África o Asia, si codician consumo se van para la USA;

