Cuando en 1985 Mijaíl Gorbachov subió al poder en la Unión Soviética, implementó las políticas de la Perestroika (la reforma económica) y de la glásnost (la «transparencia» de discurso). En junio de 1988 declaró el principio de libertad de elección para los gobiernos del Bloque del Este y rechazó el uso de la fuerza militar soviética en defensa del poder de estos países. Sin el respaldo soviético para acabar con la disidencia del pueblo —como había sido