—El colegio era estricto —cuenta—. Tenía cosas que eran realmente traumáticas, como lo que llamábamos «tortura televisiva». En los años ochenta la mayoría de la gente de Alemania Oriental veía canales occidentales, sobre todo las noticias.15 Nadie veía el telediario de la RDA, a pesar de que lo ponían todos los días en las cadenas estatales, en versión larga y corta.