—A veces pienso que si soy demasiado sincero con mis compañeros en la librería se ofenderán… —comenté, meditando sobre las enseñanzas de Ty. —Una cosa es ser sincero y otra ser grosero, Blake. Utiliza el sentido común. Y recuerda: puedes decir lo que quieras siempre que lo digas con respeto.

