Llegar al siguiente nivel siempre exige terminar con algo, dejarlo atrás y seguir adelante. El crecimiento mismo nos exige hacerlo. Sin la habilidad para terminar las cosas, las personas quedarían estancadas, sin llegar a ser lo que podrían ser y sin la posibilidad de lograr todo lo que sus talentos y habilidades puedan ofrecerles.