Me arropo con el manto del amor y me duermo lleno de buena voluntad para todos. A lo largo de la noche, la paz permanecerá conmigo, y por la mañana estaré repleto de vida y amor. A mi alrededor ha sido dibujado el círculo del amor. No temeré ningún mal, pues tú estás conmigo. Duermo en paz, me despierto feliz, y en Él vivo, me muevo y tengo mi ser.