Al contrario, la naturaleza del hombre forma parte de una naturaleza libre, intelectiva y justa, pues distribuye equitativamente a cada uno de los seres, en proporción a su merecimiento, el tiempo, la sustancia, la causa, la energía, el accidente. Advierte empero que no encontrarás la equivalencia en todos los casos si comparas separadamente una unidad con otra unidad, pero sí cotejando globalmente el conjunto de una especie con el conjunto de otra.