«¡Infeliz de mí, dice uno, porque tal cosa me aconteció!». No, al contrario: «Dichoso yo, porque habiéndome ocurrido esto, continúo sin pena alguna, ni quebrantado por lo presente ni amedrentado por lo venidero. Una semejante desgracia hubiera podido ocurrir a cualquier otro; y éste no hubiera sabido continuar, como yo, sin apenarse». ¿Y por qué será la adversidad un infortunio más bien que una ventura? ¿Es que llamas infortunio del hombre lo que no se desvía de la intención de la naturaleza humana? ¿Y te parece por ventura desvío de la naturaleza humana lo que no se opone a los designios de
...more