En los últimos años, han surgido varios métodos y prácticas ágiles para ayudar en este propósito, pero lamentablemente la forma en la que se han definido algunos métodos “agiles” y peor aún, cómo se han aplicado por algunas compañías, han degenerado de nuevo en procedimientos de trabajo sistemáticos, que dificultan, a la práctica, el desarrollo de software.

