¿Cuál era su trabajo, señor Crank? —Obrero de andamio. —¡Arthur Crank, baja de ahí ahora mismo! Arthur miró hacia abajo. —Oh, dioses, han traído a mi mujer —dijo. —¡El agente Fiddyment aquí presente dice que estás… —la cara lejana y rosada de la señora Crank hizo una pausa para volver a escuchar al policía que estaba de pie junto a ella— …interfiriendo con el bienestar mer… can… til de la ciudad, viejo chiflado!

