Sara R.

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Con el tiempo, las mujeres aprendimos que ser como los hombres no era precisamente lo más deseable. Y, en vez de una Patti Smith, las chicas de hoy tienen una Lady Gaga, que se viste de hombre, de mujer o de filete de ternera, según le viene en gana. Mucho más libre.
La ridícula idea de no volver a verte
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