Kindle Notes & Highlights
El final de la historia es que cada nación verá el valor de Jesús y cada nación cantará.
Mi oración de vida ha sido como dijo el rey David: ‘No daré sueño a mis ojos, ni a mis párpados adormecimiento, hasta que encuentre un lugar para el Señor...’
Dios me permitió escuchar la adoración de la manera en que Él la escucha.

