En este caso está especialmente el autor de María. Hace cuatro años que era completamente desconocido; hace tres que se presentó en Bogotá con un volumen de versos que fueron recibidos con raro entusiasmo; y hace pocos días que ha dado un nuevo volumen en prosa, conteniendo una novela bien elaborada, bien escrita, bien sentida. Regalos como este no se hacen todos los días a la sociedad; y el regalo es doble, y doblemente precioso, porque si el libro vale mucho, el autor vale más.