Un día de 1997, sin previo aviso, los seres humanos descubrieron que los límites de la piel ya no los detenían. Desde entonces las personas pueden traspasarse y fusionarse, obteniendo características compartidas. Cesar, un muchacho de provincia, se fusionó accidentalmente con una niña siria cuando estaba en preescolar. Desde entonces desea fervientemente volverla a ver, y desarrolla poderes telepáticos que no puede controlar. Millones de personas en el mundo han tenido experiencias similares, y todos empiezan a presentir el advenimiento de un ser que parece entenderlos a todos simultáneamente. En esta, su segunda novela, que fue mención de honor en el concurso de Ciencia Ficción Isaac Asimov del Ateneo de Puerto Real, España del 2017, Luis Carlos Barragán crea un nuevo mundo sin límites para la carne, en cuyas páginas lo imposible se vuelve norma: gigantes, alucinaciones y fiestas underground, conspiraciones y religión se mezclan para crear una novela única en el panorama de la ciencia ficción colombiana.
Luis Carlos nació en Bogotá, Colombia, estudió Artes Plásticas en la Universidad Nacional de Colombia, e hizo una maestría en historia del arte islámico en la Universidad Americana del Cairo, Egipto.
Ha sido ganador del X concurso de novela de la Cámara de Comercio de Medellin con Vagabunda Bogotá, el II concurso de Historias de amor de Timbío, Cauca, fue finalista del Rómulo Gallegos en el 2013, y mención de honor en el concurso Isaac Asimov de Puerto Real, España con su novela El Gusano, en 2018, y el premio George Scanlon también en 2018, y también ganador en el concurso de Ucronías Perú, próximo a ser publicado. ---------------------------------------------- Luis Carlos was born in Bogotá, Colombia, studied Visual Arts at the National University of Colombia, and did a master's degree in Islamic Art History at the American University in Cairo, Egypt.
He has been the winner of the X novel contest of the Cámara de Comercio de Medellin with Vagabunda Bogotá , the II contest of Love Stories of Timbío, Cauca, he was finalist of Rómulo Gallegos in 2013, and honorable mention in the Isaac Asimov contest in Puerto Real, Spain with his novel El Gusano, in 2018, He also obtained the George Scanlon prize in 2018, and also winner in the Ucronías Peru contest, soon to be published.
Maravilloso de principio a fin. Es un libro del cuál no puedes esperar nada y eso lo hace más maravilloso aún. Esperar un final es absurdo, sin sentido. No puedes pretender predecir que pasará. Tendrías qué ser el Gusano para saberlo. Sólo hay que disfrutarlo cómo viene. Te hace re-plantear absolutamente todo en lo qué crees, te hace re-hacerte preguntas que creías tener resultas, te muestra la empatía de la forma más cruda y tétrica posible. Me hace desear ser parte de ése mundo y a la vez me aterroriza pensar en ello. Cada descripción te remueve las entrañas y cada suceso te duele cómo sí fuese mío, porque es tan cotidiano pero tan extraño a la vez qué termino pensando "¿Es esto normal?¿Debería ser esto normal?" No amas completamente a los personajes. Tampoco los odias. Y eso me encanta, porque se parece al mundo real. No existen personas perfectas, no existen personajes perfectos. Sobre llevan los acontecimientos cómo lo haríamos las personas "reales". Sienten cómo las personas "reales". Son cómo las personas "reales". ¿Son las personas reales? Y es tan weird, que la palabra weird le queda pequeña.
This entire review has been hidden because of spoilers.
¡Qué libro maravilloso! Un libro sobre el otro, sobre su extrañeza y su cercanía, sobre la soledad, la compañía y la desolación. Un gran libro, que no puede serle ajeno a nadie.
Gusano es una distopía a medias. O tal vez es que pretendió ser "muy completa" y ese precisamente es el problema. La idea es muy buena, la forma en que el escritor define ese mundo, que es este en 1997, cuando la gente mediante el contacto físico se mezcla, se funde; esa idea es genial. Crea atmósfera y un conflicto interno de ese niño que depronto se ve tapado, aislado del amor y la sociedad por la lana y el sudor. Pero el problema viene cuando el escritor, por ratos, pierde la fé en su historia y deja de tomarla en serio. La llena de chistes flojos, de comentarios de farándula política sin relevancia para la historia y luego como que le cuaja la cosa y decide que hay que volver esto un texto serio, y empieza a meter el conflicto armado, religión... Y no es que a la distopía le sobre esto, no, solo que el escritor no es capaz de impregnar su novela sin caer en lo didáctico. Los personajes lanzan clases magistrales dentro de los diálogos. El problema, para mí, radica en que el texto no es un compendio de chistes, ni una distopía, ni un ensayo y entonces falla por su indecisión. Se nota la falta de credibilidad en el género literario, y por eso quiere compensar con una profundidad que sobra.
Mientras lo leía pensaba mucho en la pandemia, pero que en este libro aparece una pandemia mucho más intensa en la que cualquier contacto puede "contagiar" a las personas, y aunque este contagio se ve frecuentemente como algo malo, como un problema también hablan de cómo esto puede ser una manera de superar los conflictos de la humanidad, a través de un tema que siento que no tiene una respuesta clara: la identidad.
Los cuerpos se fusionan, las identidades se combinan constantemente, y entonces, estas identidades en "movimiento" se pueden ver como una manera de conseguir una inteligencia superior, pero esta novela deja más preguntas que respuestas, sobretodo: ¿Hasta qué punto llega la identidad? ¿Cómo es que esta se puede mezclar y combinar y aun así conservar la esencia de los seres que se fusionan? ¿Entendernos entre nosotros haría un mundo más justo? Por lo menos a esta última pregunta el libro parece responder que para hacerlo el mundo tendría que volver a empezar. Al menos alcanzamos a comprender lo que pasa si la piel y la carne ya no son un límite.
El Gusano se comportó a mi parecer como una curva Gaussiana, llamó mi atención desde la primera pagina, y a medida que iba leyendo me enganché mas. Lo disfruté demasiado hasta la mitad donde tuvo un gran punto de inflexión en la historia, tanto para los lectores como para César el protagonista, sin embargo, después de ese momento me resultó acelerado en el desarrollo de su historia, con un desenlace afanado, y muchas veces inverosímil, se introduce un narrador en tercera persona y se toma un camino paralelo a la forma como se nos mostraba la historia ( a través de los ojos de Cesar), aunque todo está bien escrito, se siente diferente, como un libro distinto, e intenta mostrarnos una una historia que será relevante ( al parecer) al final de la historia.
La historia comienza con César, un niño de Timbío, Cauca, y el hecho que marcará toda la historia, su eje principal, la fusión con una niña siria de su misma edad debido a los acontecimientos mundiales y el inicio del viaje de los dos para reencontrarse. El autor se gasta demasiadas paginas mostrando la realidad colombiana ( Guerrilla, paramilitares, cultura, etc), un cliché de muchos escritores colombianos, pero el pecado viene cuando uno se da cuenta que eso no será relevante en la historia.
Los personajes secundarios son planos ( Su mamá, Pacho, R34, e incluso Sara, por mencionar algunos). Tenemos saltos donde se intenta mostrar un drama con su mamá, que se abandona y se cierra de forma abrupta al final, un estilo de literatura urbana a través de los "vaporwavers" y el estilo de vida Bogotana. Bastantes elementos de horror con las descripciones de las fusiones, un punto a favor, y finalmente muchas referencias místicas a través de distintos puntos de vista religiosos, Cristianismo, judaísmo, islamismo, entre otros.
Hay demasiado realismo en el libro a través de los acontecimientos geopoliticos que muestra el autor, no es de mi gusto para una obra de ciencia ficción, y se siente muchas veces como un discurso político. El conflictio sirio y colombiano son elementos que al autor intenta mostrarnos constantemente. El autor es indeciso en el desarrollo de su historia, quiere abarcar muchas cosas y al final se siente superficial en esos elementos, por ejemplo, intenta esclarecer de forma científica lo que sucede, pero al mismo tiempo darle un toque divino e incluso extraterrestre.
Cuando se introduce la historia final, que encajará con el misterio del Gusano, todo se cae. un ambiente postapocalíptico acelerado demasiado común, personajes nuevos, planos e inverosímiles. La explicación científica se hace en dos paginas, usando elementos geopolíticos muy superficiales. Los arcos se cierran tan rápido que no da tiempo de analizar nada, el final no convence nada, por lo tanto, el autor intenta darle un cierre místico para reforzar los vacíos.
Finalmente me gustaron las ilustraciones hechas por el mismo autor, la estética en general es muy buena, la historia es original asi no me haya gustado su desarrollo. No lo tomaría como una obra de ciencia ficción relevante, simplemente como un libro un poco entretenido que vale la pena leer por si se quiere descubrir a nuevos autores jovenes colombianos.
Un tema muy interesante, que tiene el transfondo de hablarnos de como el ser humano necesita el contacto con los demás, desde un simple abrazo hasta las relaciones sexuales. También nos habla de la importancia de la creencias cuando se siente sin rumbo o al tratar de explicarse uno mismo lo que no se entiende.
Sin embargo tuvo muchas lagunas en la historia e inconsistencias que no me permitía sumergirme en la historia. Hubo momentos que lo sentí un tanto repetitivo,dándole vueltas aún mismo punto si profundizar o desarrollarlo.
¡Qué carajos acabo de leer! Es bogotanísimo, del Medio Oriente, es universal. Cuestiona la identidad, la religión, la filosofía… y al final resulta siendo una historia de esas que no quieres dejar de leer. Súper entretenida en medio de lo asquerosa que también puede ser. Para tomar literal y figurativamente, con muchas ideas a las que darle vuelta. Recomendada.
Una historia increíble para repensar la humanidad entera, las relaciones, las creencias, la biología, la identidad, la sexualidad. Las obras de barragán son increíbles, la lucidez de sus historias y lo complejas que llegan a ser, sobretodo el gusano, no dejan de sorprenderme. Ojalá la ciencia ficción latinoamericana llegue a tener el lugar que se merece.
3.5 No sé qué pasa con estos libros que empiezan muy bien y hacia el final se quiebran. No estoy segura de si lo volvería a leer. Es denso pero esa densidad se siente forzada. No sé.
Sentí este libro muchísimo mas cercano a mi, a distintos niveles, por el hecho de que soy bogotano nacido fuera de esta ciudad. El autor refiere con esta novela un mundo de ciencia ficción que muchas personas vivimos, por eso me gusto. Grandes enseñanzas frente a lo que me hizo pensar como una ética del contacto con el otro y lo otro. Un final sorprendente que aun no entiendo, y por lo mismo me permite seguir dando vueltas en posibilidades. En general se dicen muchísimas cosas importantes e interesantes en los diálogos a una velocidad que recuerda la realidad que vivimos. Una chimba!
Bueno, mi cerebro acaba de explotar. No sé qué putas acaba de pasar pero fue maravilloso. Necesitaré un par de días para procesar esto, de pronto para ese entonces podré formar un pensamiento lo suficientemente coherente para explicar lo mucho que amé este libro. Lo único que diré: ahora les temo a los gusanos. Y a las personas. Particularmente a tocar personas, si me ven porfa no me toquen JAJAJAJA
Este autor ha ilustrado muy bien y en color su propio libro, y para este tema raro las ilustraciones tienen valor particular. Él imagina con muchos detalles cómo sería si la gente puede fusionarse en cuerpo.
Se escribe: "En Colombia habíamos cometido un error reggaetonero: habíamos permitido tocarnos, ahora estábamos como locos buscando a todas, absolutamente todas las personas que habíamos tocado. De alguna forma, lo que queríamos era...que fueran parte nuestra." (p. 159) El cuento se extiende a través de varios paises. También hay mucha representación de temas transgéneros en este surrealismo y eso es una ventaja gigante.
Me ha gustado mucho. Pensaba que iba a leer un tipo de scifi muy despegado de la realidad y me he encontrado con todo lo contrario. Creo que si de algo va este libro es de la globalización y sus efectos. La globalización de las comunicaciones por supuesto, pero también la del miedo, los dioses, los afectos y los monstruos. Sus excluidos, sus fronteras y sus cadáveres. Esperamos la llegada del Gusano.
Me gustaría darle menos estrellas, debido a que la moraleja que termina por anudar la historia es un rechazo radical a mi visión del mundo. Pero incluso con esa conclusión de tonalidad propagandística sigue siendo un ejemplar excelente de ciencia ficción colombiana. La escritura fluye, las escenas captan la atención y la trama estimula el sentir.
El libro tiene muchas cosas que destacar positivamente. Es una historia narrada por un protagonista con una identidad compleja, en un contexto que mezcla cotidianidades de la vida e historia colombiana con una distopia realmente única, y cuyos detalles son muy efectivos en despertar extrañeza a uno como lector. También hace un trabajo muy bueno en ofrecer definiciones que dan sentido a los detalles de la ficción, pues los asocia con términos y referencias tanto religiosas como físicas. Además, las ilustraciones son increíbles y aportan significativamente a la construcción de este universo y a lo visceral de sus descripciones. No obstante, tiene puntos bajos y partes lentas que hicieron que mi experiencia fuera conflictiva. Lo recomendaría de todos modos porque no todos los días uno se encuentra con lecturas así y aún sin saber mucho de literatura se puede ver que lo que hace el autor es bien disruptivo
Luis Carlos Barragán desafía a cualquier lector con este libro. Se atrevió a escribir algo muy irreverente, original, líquido, feo e inteligente, que rompe con cualquier pretendida norma de modestia y cordura en la literatura.
Debo decir que este es, ante todo, un libro de filosofía construido desde la ciencia ficción. Barragán desparrama una historia desordenada, caótica y grotesca que cobra sentido, de tanto en tanto, a través de preguntas y planteamientos importantísimos sobre el género, la raza, la clase, la religión y el poder.
El autor desafía los sistemas de opresión al proponer un universo donde todos los seres son susceptibles de fusionarse entre sí: psíquica, afectiva y físicamente. Nos plantea un mundo donde negros y blancos, homofóbicos y gays, mujeres y hombres, opresores y oprimidos terminan unidos. Y con ello, hace una revisión de la empatía, la polarización y la construcción de estado, guerra y poder.
Todo el tiempo me hizo pensar en lo que Jacques Lacan planteó desde el psicoanálisis: el otro y el Otro. Este es un libro que aborda con mucho detalle ambos conceptos desde un mundo psicodélico, galáctico y excesivo, donde hay un gran Otro, una especie de conciencia colectiva que cruza los límites de la otredad para interpelarla, interrogarla y explorarla.
Toda la parte teológica fue muy confusa para mí, especialmente al final del libro (y algo decepcionante). Entiendo que el gusano es una metáfora con muchas funciones, cuyo punto de partida es un relato judeocristiano. No obstante, fue muy extraño —a mi parecer— ese diálogo intergaláctico con el Corán y la Biblia. Muy extraña la idea todo lo del arca de Noé y de Noé como maldad. Todas las preguntas y los conceptos teológicos fueron un laberinto difícil de entender. Siento que esas partes fueron escritas desde elucubraciones muy íntimas del autor: poco porosas, poco accesibles.
Debo decir que por momentos me sentí muy incómoda con la extravagancia y el caos de la obra. Incluso llegué a preocuparme genuinamente por la salud mental del autor, pues percibí que con este libro cruzó barreras y resistencias psíquicas que no son fáciles de atravesar desde una normalidad neurótica. Al mismo tiempo, me dejé seducir por su brillantez —tan apabullante como su desorden— y me sumergí en una construcción literaria que nunca antes había visto.
En cuanto a la construcción de personajes y al hilo narrativo, también hay caos, partes inconexas, telas de araña narrativas que dejan una impresión medio construida de ellos y mil dudas.
En todo caso, con toda la fascinación e incomodidad que me hizo sentir este libro, diría que estamos ante un escritor que está marcando la ciencia ficción del mundo y la forma de hacer filosofía desde la ficción. También diría que Barragán es un autor en clara evolución y quiero leer toda su obra y seguirle la huella.
Mucho se habla de empatía, de ponerse en los zapatos del otro y de ser solidario ante determinadas circunstancias, pero ¿cuándo realmente se toma en cuenta lo que vive o padece alguien más? ¿Cuánto pesa un escenario complejo en forjar la forma en que se observa el mundo?
El Gusano es un libro difícil de reseñar, con una propuesta que habita entre el surrealismo y la crítica social, además de contener múltiples ideas entre líneas. Su premisa es simple: los humanos pueden fusionarse mediante el contacto, compartiendo rasgos y pensamientos, pero también alterando por completo el status quo.
La historia sigue a un joven colombiano que establece una conexión con una niña siria, contrastando no solo la realidad lejana de Siria y su impacto, sino también presentando de manera única los efectos de la guerrilla en Colombia a finales de los años 90. El relato muestra cómo los guerrilleros también han sucumbido al mecanismo de fusión como una vía para intentar escalar y escapar del sistema.
Es una propuesta audaz que versa sobre críticas al sistema, donde el autor reimagina un nuevo orden social en el que se prohíbe el contacto humano. La premisa detrás de la unión de conciencias es ambiciosa: no poder callar las voces ajenas, llegando al punto donde la conciencia individual puede volverse doble o múltiple.
Asimismo, se explora cómo el gusano se convierte en un símbolo divino, inamovible pero omnipresente en cada rincón.
Las ilustraciones son un elemento clave que refuerza una realidad distorsionada, donde lo bestial se siente mucho más cercano.
Qué experiencia ha sido leer este libro, muchos sentimientos encontrados (en el sentido de haber sido consciente de ellos de forma más “real”), encontrados aún sabiendo que siempre estuvieron presentes, pero reacios a terminar de materializarse.
Creo que Luis Carlos Barragán logró plasmar de manera bastante creativa y extraña (lo cual es propio de las obras de Vestigio) una de las problemáticas que considero yo, son de las más relevantes para esta generación: El frágil concepto de la moral y la ética. Desde el surgimiento de internet y la globalización, es inevitable verse involucrado en la vida de otros, en sus perspectivas y maneras de vivir, su cultura y costumbres. De pronto somos más cercanos los unos a los otros, todo parece correcto, todo tiene una razón de ser, una justificación, una causa, y cuando de pronto todo es válido, parece que ya nada lo es. En algún momento, llegamos a sentir que el mundo es demasiado para nosotros, que hay muchas creencias y opiniones, la objetividad deja de ser un método realista para analizar fenómenos y todo se amolda y adapta al contexto, a cientos de miles de millones de contextos distintos, y el nuestro se vuelve insignificante, uno más del montón. Siento que hay cierto fenómeno de despersonalización en nuestra sociedad a causa de esta nueva manera de relacionarnos, y que se reflejó muy bien en “El Gusano”.
Los humanos somos seres que se caracterizan por esta alta dependencia a la vida en sociedad, es una parte inherente de nosotros el querer encajar para lograr la supervivencia, siento que este componente se explotó de gran manera desde el inicio de la obra, pues la nueva posibilidad de fusionarse abría una puerta distinta para conocer al otro, para relacionarse con el otro; y por ende, avanzar en el concepto de sociedad, aumentar las posibilidades de supervivencia. El contacto físico puede mostrar muchas intenciones en cuanto al entorno, es una manera muy humana y muy visceral de demostrar intenciones, siento que la sociedad de esta historia al verse privada de la posibilidad de acceder a esta herramienta para continuar su camino evolutivo entró en una etapa de redescubrimiento que siento yo, se explicó y terminó de desarrollar bastante bien a final del libro, en un punto me sentí también parte del gusano, me sentía como un observador omnisciente y al mismo tiempo que sólo conocía una realidad, me gustó la forma de llevar la historia en cuanto al uso de perspectivas.
No considero que tenga ningún fallo demasiado notable. La narración fue muy buena a mi criterio, aunque siento que a veces la mezcla de demasiados bagajes culturales te saca un poco de la atmósfera de la obra, me da la impresión de que en algunas ocasiones se mezclan demasiadas situaciones bastante ajenas las unas otras (en cuanto a contexto) que pueden sacarte del ambiente general de la obra, a pesar de que objetivo sea claro, hay piezas que no terminan de encajar demasiado bien en la estructura. Respecto a otros aspectos más técnicos, a veces sentí que las descripciones tenían una esencia un poco sosa, algunas muy llenas de adjetivos que me daban demasiada descripción y a la vez muy poca, no algo que haya pasado seguido (ni siquiera es la norma), pero como resalté con el punto anterior, puede llegar a sacarte un poco del ambiente. Me hubiese gustado el poder ver un poco más del desarrollo de los personajes como individuos, a veces sentía que no conectaba precisamente con ellos sino con la idea general del ciudadano de ese mundo, pero al final del libro creo que entendí un poco mejor este punto en el desarrollo.
Me alegra mucho haber disfrutado tanto este libro, superó mis expectativas y me ilusionó bastante encontrar este tipo de escritores de Sci-Fi en Latinoamérica, siento que nuestras culturas tienen mucho que contar desde sus propias perspectivas y este un claro ejemplo de ello.
"Las mentes humanas y animales, unidas en una sola, finalmente abrieron murallas que separaban nuestros pensamientos. Fue como abrir los ojos por primera vez. Nuestras batallas habían sido innnecesarias y nuestras guerras absurdas. Guerrilleros, feministas, neonazis y paramilitares construían pro primera vez la gran mente. Habíamos sido tan tontos antes y ahora era claro que la realidad era solo información que codificábamos. Podíamos ver lo irreal que resultaba la realidad. Nuestra interpretación de la información daba risa".
"Los pisos se quebraban y las plantas se tomaban lo que la historia les había robado".
"Cuando se quitó la camisa y el pantalón ... se convirtió en una nube de pájaros y se fue volando".
No es lo que normalmente leo, pero me gustó. La idea apocalíptica interna y biológica, con esa fusión de seres, me atrapó un buen. Especialmente la parte que nos recuerda de lo que es capaz el ser humano y de la falta de empatía que existe en el mundo.
En general me gustó bastante, más de lo que pensé. Te deja con esa sensación incómoda pero interesante, como de “ok… esto sí me dejó pensando”.
This entire review has been hidden because of spoilers.
Si las células complejas primigenias pudieran disfrutar de la literatura, este sería su libro favorito. De hecho, estoy segura que no fue Barragán si no su microbiota la que escribió esta perturbadora, fantástica e imprescindible oda a la endosimbiosis.