Novela alrededor de la monja novohispana sor Juana Inés de la Cruz, que en los últimos años debió deshacerse de sus libros y de la palabra, acosada por los altos funcionarios de la Iglesia en Nueva España. La novela mira a sor Juana a través de las mujeres reales y ficticias (abuela, madre, hermanas, tía, maestra, virreinas, esclavas, monjas y el obispo Manuel Fernández de Santa Cruz, alias sor Filotea) que acompañaron su tiempo (la segunda mitad del siglo XVII) y que tejieron sus destinos por contraste o en complicidad con esta mujer sobresaliente.
No me gustan las novelas históricas, pero mi amor por Sor Juana me incitó a leer esta novela de Mónica Lavín. Al final, sólo recordé por qué no me gustan las novelas históricas.
Y es que "Yo, la peor" no es el resultado de una extensa investigación sobre la vida de Sor Juana y de la mujer mejicana del siglo XVII, sino una excusa para escribir un melodrama: la novela se narra mayoritariamente desde las perspectivas de las mujeres que rodean a Sor Juana. El Fénix de México se convierte en un pretexto narrativo para explorar el erotismo femenino (de la madre de Sor Juana; de su maestra -a quien se refiere en la "Respuesta a Sor Filotea"-; de una compañera cortesana; y hasta de la propia Juana Inés). Al final, muy poca Sor Juana y mucho chisme (novelado, por no decir ficticio, para acabarla de fregar).
Hay errores en la documentación histórica que son verdaderamente lamentables y que no se le perdonarían a un alumno de licenciatura. Por ejemplo, que en la novela se afirme que Góngora y Quevedo eran poetas "recién publicados", siendo que ambos habían muerto varios años antes que Sor Juana y que sus obras ya tenían décadas en circulación. Quizás exagero en este punto, pero casi me da la impresión de que en esa sencilla mención los tratan como contemporáneos de Sor Juana.
Y, claro, me molestó que en la bibliografía figurara la obra completa de Sor Juana en la edición de Porrúa (de la colección "Sepan cuantos"), cuando a disposición de la autora están las ediciones de Antonio Alatorre, Gabriel Méndez Plancarte y Alberto Salceda.
En fin, puede que exagere. No me parece que estuviera mal escrita. Se deja leer rápidamente, como todas las novelas de las grandes editoriales comerciales. Pero siento que la novela no sólo no aporta nada a la comprensión de la vida y obra de Sor Juana (cosa que no tendría que hacer), sino que se cuelga de un personaje amado de la historia de la literatura mexicana para escribir chismes apócrifos.
Me ha decepcionando. El libro tenía bastantes buenas criticas y esperaba que me entretuviera. Pero el hecho es que, quien esté intersado en leer este libro, debe de conocer la vida de Sor Juana mucho antes y además, digamos que la forma en que lo lleva Mónica Lavín no es muy agradable ni ameno. Los personajes se aparecen de la nada y luego, como 1/3 del libro está dedicado a los personajes secuandarios o antagonicos dejando a Sor Juana para atrás. Es decir, tiene mucho relleno .
2.5-3. It's slow in lots of places, likely a result of trying to write close to the period's style. A little lower, though, because the book sells itself as revealing something about Sor Juana that wasn't commonly known before, and there's really very little of that. It is great, however, at giving the reader a picture of what life was like for women at the time: rich, poor, illegitimate, married, unmarried, intelligent, enslaved, indigenous, religious and not so religious, women. So if you're a fan of historical literature, you'll like it. Tbh, the famous episode that makes us all read this, Sor Juana's response to the priest who asked her for a criticism that wasn't really wanted, only takes up the last 40 pp or so of the book.
Qué difícil acercase a Sor Juana, volar al s. XXVII y descubrir su genialidad y los obstáculos que vivió. La novela entretenida aunque esperaba más de la propia Sor Juana. 3.5
Esta es una bienintenecionada novela histórica con un alcance más bien modesto. Mi problema es que hay mucho menos de lo que uno esperaría leer en una novela de Sor Juana Inés de la Cruz y en cambio, hay mucha información de mujeres que le rodearon. Sin embargo, si hay tantos detalles que se desconocen de Sor Juana, los que se desconocen de estas otras mujeres tienen que ser menos, pero lo que es más, no interesan demasiado, o al menos no tanto como los que uno esperaría de la protagonista, lo que nos hizo comprar y leer el libro en primer lugar. Adicionalmente, sin detenerme a revisar, estoy convencido de que durante la mención de todas estas mujeres, se dio una visita a su intimidad sexual y el erotismo en su vida. Algo inesperado pero sobre todo, innecesario. No logro quitarme de la mente las exageraciones y tonterías de Francisco Martín Moreno y aunque no tiene comparación el tratamiento a este tema, me parece francamente distrayente e innecesario. Supongo que el conocimiento de estas mujeres se supone que nos lleve a un conocimiento más profundo de Sor Juana, pero a mi no me lo pareció y sentí que el ritmo y la coherencia de la novela padecieron al saltar de una persona a otra. Sin duda hay peores cosas qué leer, pero ésta pudo ser mejor aún. Eso si, le agradezco a la autora haberse saltado la teoría de que la amistad tan profunda entre Sor Juana y la segunda virreina eran causadas por amor lésbico. Y por supuesto que no me importaría si así fuera, pero a falta de más información me quedo con las teorías menos polémicas (toma nota Francisco Martín Moreno, en lugar de "deschongarte" escribiendo burradas) y prefiero adentrarme más en lo que sí consta. Esto por ser una novela, en un ensayo se aceptan y se agradecen las teorías y las referencias serias.
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Esta es mi segunda lectura del libro pero solo tenia ligeros recuerdos. En esta ocasión, realmente, pude obtener la perspectiva que Mónica Lavin pretendia. Cada una de las mujeres que estuvo alrededor de la "peor de todas", nos dá cuenta de lo que vieron en torno a Juana Inés, su niñez, su llegada a la ciudad, su inclusión al palacio, su desarrollo intelectual, su ingreso al convento. Diferentes perspectivas, condiciones, entornos, ideas, sueños, miedos, se entrelazan en esta novela. Reiteró mi admiración por esta mujer científica, poeta e intelectual, única en su tiempo. Una historia que nos hace reflexionar sobre el papel, rol y condición de la mujer en una época distante, madre, esposa, hija, maestra, esclava, amante, monja, intelectual, tía, sobrina, disfruté mucho la lectura.
Muy interesante libro. Excelente historia sobre Sor Juana, la hace más real y humana y hace que te identifiques con sus problemas, que a veces aun se repiten. Es admirable su carácter, decisión e inteligencia, siempre incomprendida en una época sin salida para una mujer inteligente.
Siempre admiré a Sor Juana Inés de la Cruz, con este libro la conocí mejor desde que era una niña. Con una gran pluma Monica Lavin narra su vida con intensidad e inteligencia. Las importancia de tantas mujeres en su vida..y el colmillo de los Lobos...
Me encantó la novela. Una biografía muy bien llevada, que finalmente le hace justicia a Juana Inés. Sin apasionamiento ni juicios sin fundamento. Su niñez en la Hacienda de Panoaya fue lo que más disfruté. Conocer cómo nació su interés y su gusto por el saber. Su tierna convivencia con el abuelo, su primer acercamiento a los libros, su sensibilidad hacia el entorno y raíces. El gusto por ir a la escuela. El significado de los volcanes en su vida. Las costumbres en el campo. ¡Hermoso contexto!
Bonita descripción de su travesía por los lagos y canales hasta llegar a la Ciudad. ¡Imaginé la escena!
En la Capital, el bullicio de la gente y el contraste entre una vida tranquila que dejaba atrás, a un estilo más refinado donde todo es evaluado, hasta la forma de vestir. El protocolo y las formas. El cuidado de las apariencias.
Admiré el valor de Juana Inés. Su postura ante la vida. Su firmeza para alcanzar sus deseos y metas. Aunque esto implicara el romper con las reglas. El contraste entre ella y Bernarda, muestra dos tipos de mujer. La común, que atiende a las reglas sociales y que representa a la mayoría. La que necesita de un hombre para sentirse protegida. Y cuya máxima aspiración es llegar a ser esposa, madre y disfrutar de los chismes y eventos sociales. Y la diferente, la rara, la que aspira a cultivarse. La que no se conforma con banalidades ni superficialidades. La que gusta del Arte, de la Ciencia. La que alimenta el alma con su poesía, con su habilidad de palabra y que lucha por la expresión de la mujer y su crecimiento como Ser humano. La que nunca calla y para quien las lisonjas de los hombres no son suficientes.
Interesantes los temas abordados sobre el poder de la iglesia y su visión ante lo que entonces se consideraba herejía. La envidia y las intrigas. El tema de las clases sociales, las famosas dotes, los hijos naturales, el menosprecio hacia la mujer viuda, la esclavitud, el mestizaje.
En fin, una excelente biografía de un personaje único en la historia de México. Que todos debemos conocer y una época de gran riqueza cultural. ¡Mucha tela de donde cortar!
Y para profundizar más en el tema y conocer mejor a esta Décima Musa, seguro leeré el libro de Octavio Paz: "Las trampas de la fe"... un texto muy recomendado. Por lo pronto, esta novela es un buen inicio... La recomiendo ampliamente...
¡Ah!, tampoco me perderé Las recetas de Sor Juana. Seguro cocinaré alguna de ellas...como el turco de cacahuazintle....😉
Segunda lectura… Me encantó leerla en compañía y complementarla con escritos de Sor Juana como “La respuesta a Sor Filotea de la Cruz” y el “Primero sueño”. Estas magníficas producciones de Juana Inés, me abrieron los ojos aún más y subí un pequeño escalón en el largo y complejo camino al entendimiento …
Conocer su vida es maravilloso. Entender un poco de la grandeza de su mente, es ¡sublime!, ¡extraordinario!
Siendo ficción histórica al fin, su objetivo es entretener y ponerle voces a quién quizás ni habló mucho, pero debo decir que me gustó. He recorrido un poco de la vida de Juana Inés novelada, donde reconozco que algunos datos reales del Fénix de México quedaron fuera, pero el atrevimiento de un escritor de acercarse a su persona y viajar muchos siglos atrás, ya lleva mi admiración. No se puede escribir sobre un personaje tan ilustre sin haber hecho un poco (o bastante) investigación. Lo recomiendo para quien quiera acercarse a su historia y a los personajes que la rodearon en su tiempo, a disfrutar de la ficción en sus palabras y en algunos de los acontecimientos, sobre todo, al referirse a cada mujer a su alrededor, a quién la escritora les dedicó buena parte de su pluma y de su invención, a conocer un poco de lo que "quizás" sintió Juana Inés al elegir los hábitos para poder amar sus libros, y en su final, al ser despojados de ellos. Si quieres datos exactos, historicos y sagrados sobre su persona, debes saber que alrededor de su vida aún ronda el enigma, pero hay otros libros para ello. Le debo a este libro mi deseo de comprar todos los sonetos y rondillas y cuanta palabra escrita de Juana Inés exista. La última vez que que escuché sobre ella, tenía 14 años en mi clase de literatura de la secundaria.
Una novela histórica que es más novela que historia. El libro se enfoca en la gente alrededor de Sor Juana en sus diferentes etapas pero pocos de estos personajes son interesantes o con verdadero efecto en la protagonista. Si desean saber más de Sor Juana obtendrán más información y entretenimiento de su página en Wikipedia que de este libro. Si buscan una novela melodramática con ligeros tintes eróticos y usando la época colonial en México como un escenario de historias de amoríos este es libro indicada para usted.
Una fresca perspectiva sobre sor Juana, vista desde fuera, a través de los ojos de varias mujeres, algunas inventadas pero sumamente efectivas para destapar elementos de sor Juana que han sido más ignorados que otros y no tan favorecedores (como su arrogancia y su carácter necesariamente antisocial). El personaje ficticio (pero bastante probable) de la monja celosa sor Cecilia que también quiere escribir me pareció un toque brillante para poner de relieve el cómo ha de haber sido la vida de las demás monjas a la sombra de quien hizo famoso a su convento. Hay muchos momentos poéticos en esta obra y sor Juana aparece aún mejor definida a través de las personas que fueron influencia de y para ella que si Mónica Lavín se hubiera decidido a escribir una biografía como todas las demás. Es recomendable, sin embargo, conocer de antemano los acontecimientos más importantes en la vida de sor Juana para entender y apreciar mejor este libro.
Gozosa novela en torno a la vida de sor Juana Inés de la Cruz, figura mayor de la literatura hispanoamericana, como también mayor entre las mujeres intelectuales de México y el mundo. Mónica Lavín deja la rigurosa biografía histórica a los expertos que correctamente cita en el apéndice final, y en vez de eso se instala en la vida de las mujeres que acompañaron a Sor Juana desde su infancia hasta los últimos días de su batalla contra los dogmas de su tiempo. Desde esas mujeres se miran episodios de la Nueva España que recogen con suave ingenio y libertades literarias los eventos que contextualizan la obra de la poeta, pero también dan sentido a las vidas, placeres y pesares de las protagonistas de la historia cotidiana, pocas veces contada, en una matriz cultural que hoy es parte de la potente voz femenina.
Novela alrededor de la monja novohispana sor Juana Inés de la Cruz, que en los últimos años debió deshacerse de sus libros y de la palabra, acosada por los altos funcionarios de la Iglesia en Nueva España. La novela mira a sor Juana a través de las mujeres reales y ficticias (abuela, madre, hermanas, tía, maestra, virreinas, esclavas, monjas y el obispo Manuel Fernández de Santa Cruz, alias sor Filotea) que acompañaron su tiempo (la segunda mitad del siglo XVII) y que tejieron sus destinos por contraste o en complicidad con esta mujer sobresaliente.
En un principio quedé confundida con tantos nombres parecidos, pero una vez pasada la parte se disfruta mucho Es una delicia leer este libro, desde las primeras palabras, se siente la delicadeza de la escritura y su sensibilidad.
La narrativa me pareció rara, confusa y en algunas partes tediosa. Me decepcionó que la voz principal no fuera la de Juana Inés sino de las personas a su alrededor, que estás contaran sus vidas y su descripción de como percibian a la décima musa me pareció fastidiosa.
Novela que explora la vida de Sor Juana Inés de la Cruz, célebre poeta del Siglo XVIII en la Nueva España, considerada la décima musa.
Toma su título de la famosa firma con que Sor Juana concluyo su carta respuesta a "Sor Filotea" (la falsa hermana" que decía: Yo, la peor del mundo. En esta carta ella defiende su derecho al conocimiento y critica el papel limitado que la sociedad impone a las mujeres en el ámbito intelectual y religioso.
Sor Juana fue una gran figura de la literatura y el pensamiento, desde niña mostró un talento prodigioso para el aprendizaje, pero las restricciones de la época impedían que accesará a una educación formal.
Para poder dedicarse al estudio sin presiones matrimóniales ingreso a un convento de clausura, donde tuvo la libertad de leer, escribir y desarrollar su pensamiento. Hasta que su inteligencia y espíritu la llevaron a entrar en conflicto con la Iglesia y el poder masculino. Su famoso texto "Respuesta a Sor Filotea" es un manifiesto en defensa del derecho de las mujeres al conocimiento, argumentando que el saber no es un privilegio masculino.
A pesar de sus estudios fue obligada a renunciar a sus estudios y firmó su retracción antes de morir
La historia de Sor Juana resuena con la experiencia de muchas mujeres a lo largo de los siglos, las mujeres que han luchado contra la opresión y han buscado espacios para su voz han enfrentado patrones similares de resistencia y opresión.
En "Yo, la peor", Mónica Lavín nos muestra que la lucha de Sor Juana no fue sólo individual sino que forma parte de una lucha histórica más grande de mujeres que han desafiado las reglas impuestas,
Este libro se llama "Yo, la peor: la historia de la mujer que quebrantó las letras de una época", pero en realidad debería llamarse "la historia de las mujeres cachondas que conocieron a Sor Juana" ¡porque ningún capítulo es narrado por ella! No entiendo porqué este libro es tan reconocido. Creí que leyéndolo conocería más sobre la monja más famosa de México pero oh, sorpresa. Cada capítulo está narrado por otras mujeres, y no siempre hablan sobre Sor Juana, la mayor parte del tiempo relatan su mala suerte en el amor o la "falta de hombre".
Creo que el título del libro es engañoso y se valió del nombre de la monja para vendernos relatos sensibleros y morbosos de otros personajes. Recomiendo que mejor lean la trilogía de Muerte en San Jerónimo de Oscar de Muriel. En ella desde un principio sabemos que el personaje principal NO es Sor Juana, y aún así, está mucho más presente en esos libros que en este.
No es un libro que escogería leer, llegó a mis manos como un regalo, pero ha sido una grata sorpresa y una bonita oportunidad para conocer desde la mirada de la autora, las dificultades de las mujeres en la época de la Colonia en México, y como Sor Juana Inés se atrevió a desafiar los estereotipos de la época y es hoy uno de los referentes del Siglo de Oro Español. Muy bonito homenaje a las mujeres.
Me encantó. No nada más habla de Sor Juana, habla de cómo vivían en la colonia, cómo pensaban, cómo sentían. Sin duda Sor Juana será siempre un personaje enigmático y de grandes atributos.
Le doy tres estrellas porque me costó mucho engancharme. Simplemente no encontraba a Juana Inés. Más adelante en el libro (y confirmado en el último capítulo, “Escribir Yo, la peor”) entendí que la novela fue escrita a través de los ojos de sus familiares, de sus amigos y de otros personajes. Esperaba algo diferente, entendiendo que esta fue totalmente mi expectativa.
Una mujer entre la fe y la palabra: entrevista con Mónica Lavín, autora de la novela sobre Sor Juana Inés de la Cruz
La escritora mexicana Mónica Lavín habla de su exitosa novela ‘Yo, la peor’, donde narra la intensa vida de la poeta y religiosa de la época colonial, Sor Juana Inés de la Cruz.
Por Juan Camilo Rincón, especial para El País
El poeta neogranadino Francisco Álvarez de Velasco y Zorrilla, nacido en Santa Fe de Bogotá, fue uno de los tantos que dedicó parte de su vida a estudiar —y ensalzar— a Sor Juana Inés de la Cruz, considerada la “décima musa”. La religiosa mexicana fue objeto de cartas laudatorias y composiciones inundadas de exaltaciones intelectuales.
La escritora Mónica Lavín responde a esta pregunta en ‘Yo, la peor’, una obra que revela a la mujer rebelde cuyo pensamiento, entre el diálogo y la crítica, la poesía y el teatro, fue muestra de la riqueza cultural de un país amestizado de raíces náhuatl, esclavos negros traídos de África y descendientes de la España imperial.
“... he sido y soy la peor que ha habido”, decía Sor Juana en el siglo XVII. Lavín nos obsequia una narración poderosa y sin concesiones para conocer a la peor, que fue y es, sin duda, la mejor.
La primera edición de ‘Yo, peor’, se publicó en 2010, en México, obteniendo el Premio Iberoamericano de Novela ‘Elena Poniatowska’. Luego se ha venido reeditando en Latinoamérica. | Foto: El País
—En la introducción del libro ‘Sor Juana en la cocina’ usted cuenta que fue Ana Benítez Muro quien le sembró la inquietud sobre la vida cotidiana del México colonial. ¿Cuáles son sus descubrimientos más interesantes sobre el día a día en la vida de esa época?
Ana Benítez Muro —quien, desafortunadamente, murió pronto— y yo nos conocimos en un tren, el transcanadiense. Habían contratado a escritores y periodistas de gastronomía para hacer un recorrido de costa a costa. La experiencia fue fabulosa, y Ana y yo inauguramos una amistad. A nuestro regreso, ella, que dirigía una colección de cocina virreinal en la editorial Clío, me preguntó si me gustaría escribir el texto para el recetario atribuido a Sor Juana, que se había encontrado en el convento de San Jerónimo. Aquello me puso frente a una Sor Juana de carne y hueso, hecha de sabores, de tradiciones familiares de búsquedas de formas y como diría ella de Filosofías de cocina.
A partir de ahí y del texto que escribí para el libro que se refería a la cocina conventual, ‘Dulces hábitos’ —que ahora forma parte del mismo libro Sor Juana en la cocina—, me deslumbró no sólo Sor Juana sino la época que le tocó vivir. Me parece singular cómo, a pesar de ser una sociedad dividida en castas, con prohibiciones, había maneras en la Nueva España, incluso normalizadas, para el mestizaje genético y naturalmente el cultural.
Mucho de lo que hoy vivimos tiene que ver con esa época; por ejemplo, las prostitutas estaban obligadas a usar una capa roja cuando entraban a la catedral: el rojo como señalamiento de lo pecaminoso. Existían hospicios donde las madres peninsulares o criollas que habían concebido un hijo con un hombre de otra casta llevaban a sus hijos y los visitaban y mantenían.
—¿Por qué escogió a sor Juana Inés de la Cruz?
Es una referencia ineludible. Sus poemas, sobre todo los de índole amorosa, estaban ahí para volver a alguno de sus versos. Pero nunca la había pensado como persona; eso fue lo que me persuadió de acercarme a ella a través de la novela: sus dilemas, su personalidad, la época en que vivió. Quise mirarla más allá de su obra, por el tiempo que le tocó vivir y la manera en que lo sorteó.
—¿Cómo logró narrar a esta mujer sin caer en el estereotipo?
Una novela tiene que colocarse en el vértice de las contradicciones, tiene como vocación la comprensión y no hace altares de figuras que la historia ya ha colocado en bronce. Entonces mi misión era derretir el bronce y volverlo carne y hueso, una mujer con fortalezas y fragilidades que tienen que ver con decisiones, pertenencias, pasiones y posibilidades. El cliché estaba prohibido. La novela tenía que ofrecer una indagación por debajo del cliché: mente, cuerpo y época adentro.
—¿Cómo fue el trabajo de investigación?, ¿cuánto tiempo le tomó?
Sor Juana es uno de los personajes que más se ha investigado y se sigue investigando, y del que muchos libros se han escrito. A partir de ‘Las trampas de la fe’ de Octavio Paz me gustó la Sor Juana liberal y rebelde que él ofrece. También leí textos opuestos como el de Soriano Valles para formar mi propia idea de Sor Juana: talentosa, inquieta, renacentista pero sagaz, astuta y ambiciosa.
La biblioteca sobre Sor Juana, que forma parte de la biblioteca Cervantes, y que coordina una gran conocedora de la monja ilustrada, Margo Glantz, ofrece muchas perspectivas contemporáneas, estudios recientes sobre la monja. Y fueron fundamentales libros de la época como el de Antonio Rubial García, así como los del Colegio de México sobre la vida cotidiana del XVII para entender el contexto, y el de Fernando Benítez, ‘Los demonios en el convento’. La investigación duró un año, pero siguió durante los tres de escritura en donde, a la par que leía, iba encontrando los hilos anecdóticos que me iban a servir para la novela. La ‘Respuesta a Sor Filotea de la Cruz’, de su puño y letra fue esencial.
—¿Con qué criterios seleccionó la información que le serviría para escribir la novela?
Escogí todo aquello que me iluminara sobre la vida cotidiana de la época, de la experiencia de vida sobre la propia Sor Juana en los diferentes ámbitos en que vivió como el rural, el palaciego y el conventual, eran material fundamental. Una novela necesita de la materialidad de la narrativa. Necesita amueblar, vestir, mover a los personajes en una lógica persuasiva en el tiempo en que viven. A eso hay que agregarle la vida interna y lo no dicho respecto a Sor Juana.
—¿De qué manera la vida familiar y el entorno cercano de Juana Inés la llevaron a buscar el estudio como vocación (“habitar el mundo de las ideas”) y el mundo de la escritura?
Para Sor Juana Inés de la Cruz la biblioteca de su abuelo fue el lugar de descubrimiento de los libros, ella misma lo dice. Pero la biblioteca no solo es un espacio; es la relación con un abuelo, con el acto de leer, con el acto de estar enterado, abrir ventanas, puertas a temas, a lo que está ocurriendo en ese momento. En la ‘Respuesta a Sor Filotea’ es muy clara su experiencia, porque es un documento autobiográfico y sincero.
—Entre las obras de teatro, los poemas humorísticos, los villancicos, ¿qué fue lo que más le sorprendió de su obra?
La poesía amorosa, la que tiene que ver con un conocimiento de la vida; es la que me gusta releer. Me sigue sorprendiendo por su sabiduría, por su belleza, por su musicalidad y altura del manejo de métricas y rimas, por su inteligencia: “Digamos que soy feliz, triste pensamiento un rato (...) óyeme con los ojos que te escucho muda”. Dice Paz que la de la época no es una poesía confesional y lírica como la conocemos desde el siglo XX, sino una poesía preocupada por las formas, por el disfraz.
—Se podría afirmar que la vigencia de su persona está en que nunca calló ante nada. Para usted, ¿qué es lo que hace vigente su obra?
Es una gran pregunta, porque es difícil separar a la persona de la obra. Y es delicioso cuando uno puede tener el gozo de una lectura más íntima, más hecha para uno. Ella es vigente porque los temas que trata son universales y atemporales. En una época de oídos sordos, darle la oportunidad a la poesía para que navegue ligera es un gran reto del humanismo. Sor Juana no me deja, porque es inacabable. El año pasado se estrenó en la UNAM la ópera para la cual escribí un libreto sobre ella: ‘La sed de los cometas’, con música compuesta por Antonio Juan Marcos. Una ópera mexicana, ¡fue un privilegio!
—Este libro abre la puerta para leer a sor Juana. ¿Qué libros recomienda sobre ella?
Recomiendo sin duda ‘Sor Juana Inés de la Cruz o Las trampas de la fe’ de Octavio Paz, ‘Las sombras de lo fingido’ de Jean-Michel Wissmer, ‘’Sor Juana: la comparación y la hipérbole de Margo Glantz y desde luego la obra completa de Sor Juana. Yo escribí para jóvenes un texto introductorio e hice una pequeña antología para acercarlos a su obra: ‘Finjamos que soy feliz’ (Planeta Lector, 2021).
—¿Cuál es su poema preferido de ella?
“Finjamos que soy feliz, triste pensamiento, un rato”; esta idea de fingir la felicidad cuando la invadía la tristeza. Hay muchos otros: “Óyeme con los ojos (...) Óyeme sordo, pues me quejo muda”; estas trasposiciones de los sentidos y las palabras. Los que más me gustan son los poemas amorosos.
De esta novela me gustó la forma en que penetra a los pensamientos y la vida de las personas, en particular las mujeres, que acompañan a Sor Juana en su día a día, desde niña. Tanto que lo que pasa con ellas llega a ser tan relevante para la redacción de la novela como la vida de la misma de la monja, incluso me sentí más involucrada con las situaciones que “vivía” uno que otro personaje. Describe perfectamente cada lugar que fue importante para ella, así como hechos trascendentes de la época. Salvo algunos capítulos, no logré meterme de lleno en la trama, quizá por la cantidad de personajes involucrados, o por mi desconocimiento de la vida y obra de Sor Juana. No me enamora cuando los autores crean una historia a partir de un hecho o una vida que puede ser referencia más para un documental que para una novela, porque luego mi mente revuelve hechos reales y fantasía; pero creo que omitiendo este ‘detalle’ es una buena novela.
Excelente novela acerca de la vida de Sor Juana Inés de la Cruz. Es como una biografía, pero escrita desde la perspectiva de otras personas que vivieron en su tiempo. Las mujeres que la rodearon desde que era niña, y hasta que tuvo que abandonar su pasión por escribir, por aprender y por saber más. En esta obra se pueden ver pequeños aspectos de la vida cotidiana del auge de la colonia en la Nueva España. Podemos ver que para las mujeres no había grandes opciones en la vida. Y creo que también es una forma de tener otra perspectiva de lo que ya sabemos. En esta novela aparentemente es más importante lo que viven y piensan las mujeres que estaban alrededor de Sor Juana, pero gracias a esas descripciones se ve el contraste con la forma de vivir de la monja. La forma como Mónica Lavin escribió la obra, se presta muy bien para una teleserie. Lo superrecomiendo, se lee muy fácil.
Me encantó esta novela de Mónica Lavín. Interesante el ángulo de las distintas mujeres que rodearon su vida para conocer más, no solo de esta erudita de la palabra, sino del encanto del México del virreinato.
Muchos podrían tachar de "chismes" los relatos que aquí se cuentan; a mí, por el contrario, me pareció una forma exquisita de imaginar cómo fue esa época en la que el clero manejaba la vida de todos. Y tristemente sentir ira por el papel nulo que la mujer jugaba en la sociedad.
Sor Juana fue muy valiente, sin duda. Preferir un encierro permanente a vivir con plenitud, en un mundo que le era favorable, fue una decisión dura.
Espero la versión ampliada y con poemas de Juana Inés, tal como tuvo a bien indicarnos la propia autora. Ojalá que todos disfruten de esta lectura como yo lo hice.
Una grata sorpresa. La verdad que comencé el libro llevado por mi interés hacia Sor Juana Inés de la Cruz y sin una gran expectativa en cuanto a la novela, y me sorprendí mucho. Sin pretender que sea una obra capital en el estudio sorjuanista, Mónica Lavín ofrece una mirada fantástica al mundo y la vida de Sor Juana desde una óptica muy original: las mujeres que la rodearon. Lavín hace hablar, pensar y sentir a todas esas mujeres, reales o ficticias, y a pesar de ello retrata a Sor Juana de una manera muy intimista, y logra que, a pesar de que la voz no sea la de ella, se nos aparezca enterita, humana y grande, como seguramente fue. Muy disfrutable.
La autora hace un excelente trabajo ambientando la sociedad de la Nueva España, las castas y las cortes virreinales. Pero con respecto a Sor Juana la verdad es que es muy decepcionante. No conocemos al personaje sino a través de personajes secundarios, los cuales son tantos y que la autora trata de profundizar en ellos, que llega un punto en el que conoces más de ellos que de la misma Sor Juana. Lo interesante son las cartas que escribe Sor Juana a otros personajes, pero es lo único en lo que ella toma protagonismo. La verdad llega un punto en el que se te olvida que estás leyendo una novela histórica de Sor Juana Inés de la Cruz.
Excelente novela biográfica de una gran mexicana. Soy fiel admirador de Juana Inés. No había entendido su decisión de protejerse en el convento de las jerónimas para que otros compromisos no la distrajeran de desarrollar un talento entregado de las alturas. ¡Gloria a Dios Juana Inés! Tu talento y habilidad honro con pasión. El libro hace una excelente semblanza de su vida, su contexto y la CDMX de la Nueva España.
Muy buen libro. El usar a las mujeres que rodearon a Sor Juana para acercarnos a ella le da una frescura a la lectura. Es obvio que no tiene intención de ser una biografía oficial, y se va por el melodrama, así que sólo se lee como eso ... quien busque perspectiva histórica o biográfica necesita leer otro libro.