Que barrio no tiene una panaderia...y hasta dos? Que barrio no tiene sus expertos en flautas, en felipes y en miñones? En cambio, no creo que sean muchos los barrios donde se haya desatado un duelo tan terrible de cortezas y de migas, una guerra tan crocante y tan sabrosa, como la que tuvimos que vivir los vecinos de Florida.
Es un libro muy divertido, ideal para leer a los niños, sin embargo, no me gustó tanto el final, siento que los últimos párrafos lo terminaron haciendo un libro con final abierto y lo arruinaron.