Sólo te digo que mires el calendario de la pared. Señalaba uno que colgaba enmarcado cerca de la ventana. –Las cruces –continuó– corresponden a los días que has pasado con los Linton, y los puntos los que has pasado conmigo. ¿Te das cuenta? He puesto una marca en cada día. –Ya veo, vaya una idiotez, ¿te crees que me importa? –replicó Catherine con voz desabrida–. ¿Qué me quieres decir con eso? –Quiero que veas que a mí sí me importa –dijo Heathcliff.

