Agréguese a ello el hecho de que la aplicación con que esta muchacha se dedica a dibujar conchas indica en ella una búsqueda de la perfección como forma que el mundo puede y por ende debe alcanzar; yo, al contrario, estoy convencido hace tiempo de que la perfección sólo se produce accesoriamente y por azar; por tanto no merece el menor interés, pues la verdadera naturaleza de las cosas sólo se revela en la destrucción;

