«La vida de un esclavo no es sencilla, y es algo que nosotros tenemos muy presente. No somos nada, somos la escoria de nuestra sociedad y solo hemos venido al mundo para servir a aquellos que han nacido con más suerte. Y si eres esclavo, o lo aceptas o mueres. Yo decidí resignarme a aceptarlo el día en que ejecutaron a mi padre. Era eso o unirme a él en la camilla».
Katerina creía que ser esclava en Sector Gamma era lo peor que podría haberle pasado, pero eso cambiará cuando llegue a Sector Delta, un sector económicamente inferior al suyo donde descubrirá que las apariencias engañan y que su vida como esclava solo había sido el principio de algo mayor.
Con la diosa Destino hilando sus hilos en su contra, Katerina tendrá que aprender a convivir con sus demonios para garantizar su supervivencia en un entorno hostil, y encontrará aliados y enemigos que le abrirán los ojos a la realidad que se esconde bajo una sociedad idílicamente perfecta.
Cuando toda tu vida has vivido atada a unas cadenas, ¿hasta dónde estarías dispuesta a llegar para romperlas?
Lucía G. Sobrado (Marbella, 1993) se graduó en Traducción e Interpretación e hizo un máster en Traducción Audiovisual, Subtitulación y Doblaje. Además, se ha especializado en el ámbito de la corrección y de la edición y, como emprendedora nata, tiene su propio negocio. En el ámbito de la escritura, se caracteriza por las historias largas, los cliffhangers y las escenas de acción.
Desde que en 2018 empezó a escribir más en serio, ha publicado cinco novelas, dos de ellas escritas a cuatro manos: Eslabón, (Hela Ediciones, 2020), Rebelión Roja (Roomie Ediciones, 2020), Cadenas (Hela Ediciones, 2021), Somos píxeles (Selecta, 2021) y Cenizas de Esperanza (Roomie Ediciones, 2021).
Sus géneros favoritos son la fantasía y la distopía, siempre aderezados con un toque de romance.
Me ha gustado muchísimo el libro. Lo empecé con ganas y tengo que decir que no me ha defraudado. Los personajes están muy bien creados, así como la sociedad que nos describe la autora. Me han gustado mucho los personajes, sobre todo Alex, y como va madurando por fuerza Katerina, nuestra protagonista, aunque admito que hay muchas cosas en esa sociedad que no me gustan nada, ademas de las mentiras y de que parece que no puedes fiarte de nadie. Hay muchísima acción, en alguna escena me ha recordado un poco a Divergente, pero sin dudas lo que mas me ha gustado han sido las descripciones de los lugares, y el como está descrita toda la acción que hay en el libro. Tengo muchas ganas de leer el siguiente libro para ver que va a pasar a continuación, porque las cosas parece que van a volver muy interesantes con ese final que tenemos.
Tengo que decir,que entré a leer esta novela sin grandes expectativas y, quizá por eso, me ha sorprendido muchísimo y de forma muy positiva.
Se trata de una distopía en la que nuestra protagonista es una esclava con pocos o ningún derecho a decidir sobre su vida y que, por diferentes circunstancias, se verá obligada a huir. Y no solo de la casa donde sirve, sino del tipo de vida que le ha tocado por nacimiento.
Por el camino iremos conociendo diferentes personajes y veremos las dificultades a las que se tendrá que enfrentar, que no serán pocas ni pequeñas.
Como digo me ha sorprendido muy gratamente por varios motivos. En primer lugar la protagonista, katerina es un personaje fuerte y luchador pero demuestra también su humanidad el mostrar que, a veces, se hunde o no tiene fuerza para seguir peleando y aún así, sigue adelante. Creo que es un personaje que está muy bien construido y que es muy humana a la hora de demostrar fortalezas y debilidades así como sentimientos y emociones.
La trama y todo el mundo que ha creado la autora me han parecido geniales. Creo que está muy conseguido, que no es nada predecible y que le ha sacado muy buen partido.
En todo caso, me ha encantado y estoy deseando conocer ya lo que va a pasar en la segunda parte porque ese final...😱😱
De verdad, si no lo conocéis y os gusta la distopía, os lo recomiendo 100% ya que lo he disfrutado muchísimo y me ha mantenido super intrigada y enganchada de principio a fin.
Si eres amante de las tramas dinámicas, de que la acción sea un no parar y te gustan las novelas distópicas, este es tu libro.
En ningún momento (repito: NINGUNO) ha habido espacio para que el lector respirara y eso es una de las cosas que me ha fascinado de esta historia: que siempre había un suceso nuevo en la próxima página. Desde el minuto cero hasta el último, la autora ha conseguido mantener una fuerte dosis de acción permanente que hace que la novela sea un vicio y no puedas soltarla hasta llegar al final.
A esto se le suma la narración de la autora que me ha parecido muy acertada para este tipo de novela dinámica. Tiene un estilo directo, que no se detiene en un lenguaje muy embellecido o casi poético, sino que las descripciones son realistas y directas al grano.
Lo que me ha fallado en esta historia, sin embargo, han sido los personajes. Antes de nada, quiero aclarar que esto es una cosa personal mía porque suelo preferir personajes por encima de trama. Está narrada en primera persona por su protagonista, Katerina. Al ser una narración en primera persona, según que lectores, algunos se sentirán identificados o empatizarán con la voz de su protagonista, o no. En mi caso, es una postura intermedia: he logrado empatizar con el personaje de Katerina y su situación, pero no me ha llegado a calar. Realmente, ninguno de los personajes me han calado especialmente ya que, al tener tanta importancia la trama y la acción en esta historia, el desarrollo de los personajes muchas veces se queda en un segundo plano. Todo el rato sentía que realmente a estos solo se les conocía a través de la percepción de la protagonista y que si X personaje no era del agrado de Katerina, por consiguiente, no sería del agrado del lector, como es lógico las narraciones en primera persona. No obstante, eso limita al lector el poder formarse una opinión propia y objetiva sobre los personajes. Insisto que esto es una cosa personal mía, pues yo siempre soy más partidaria de las historias de personajes por encima de las de trama.
A pesar de ello, ha sido una historia muy entretenida y adictiva y estoy deseando saber que es lo que pasa en su segunda parte, Cadenas.
Reconozco que he demorado este libro por uno de los trigger warnings (en serio, muchas gracias por el aviso), que aunque por la sinopsis me lo olía venir, es un tema que no disfruto leyendo. Y una vez lo pasé, junto con el inicio que tiene un poco de infodump, Eslabón me ha enganchado más de lo que había imaginado. Me ha costado parar de leer y si hubiera tenido más tiempo, lo habría devorado en una sentada. Pero es que encima, cuando ha empezado la auténtica trama de los eslabones, ha sido como SÍ, DADME PRUEBAS MORTALES Y PERSONAJES LUCHANDO POR SOBREVIVIR.
No soy muy de comparaciones, pero esta lectura me ha dejado el mismo sabor de boca que Los juegos del hambre y Divergente (aunque me ha gustado BASTANTE más que este último). Sobre todo por la relación entre Alec y Katarina. Y es una lástima, porque hay personajes muy chulos y relaciones curiosas, pero justo la pareja principal es la que menos he tragado. Él me ha parecido muy plano para ser un secundario y no me ha convencido su relación, y ella... Había leído varios comentarios de que la gente odiaba a la protagonista y, honestamente, me ha parecido un personaje bastante coherente con las situaciones que sufre. Aunque le falta un poco de chispa, de ingenio, pues me he quedado con la sensación de que la historia tiraba de ella y que no ha tomado ninguna decisión importante, todas han sido de los demás personajes. Los secundarios, por cierto, son los que más me han gustado y ojalá hubieran habido más escenas de interacciones que de pensamientos o resúmenes (vivo por y para las escenas cotidianas entre personajes donde los puedes conocer un poco mejor).
Eso sí, he echado en falta más descripciones de lo que sucedía. Hay ideas que la autora tenía muy claras, pero que a mí me costaba imaginar pues se explicaban con retraso (como el trabajo de camarera de Katarina, que se explica cuando ya llevaba semanas con él).
4,5 / 5 Me ha encantado. Se nos presenta una civilización clasista y esclavista. El sistema se divide en sectores donde dependiendo de en cuál habites vivirás sin dificultades o en la pobreza absoluta teniendo que hacer lo que sea para sobrevivir. Este universo está explicado a la perfección y se ven las desigualdades entre sectores, lo que hace conectar con su mundo.
La historia es muy buena, se divide en varias partes, todas muy interesantes, todo está narrado de una forma genial y te hace vivir las situaciones a la perfección, y hay situaciones muy duras. La forma en la que se transmiten los sentimientos y traumas de Katerina es increíble y empatizas con ella a la perfección. Y como están descritos los escenarios y la acción es una maravilla, se entiende a la perfección y te metes de lleno en el mundo.
Todos los personajes están súper bien escritos y desarrollados, hay personajes que adoré por su forma de ser como Ginebra, y la mayoría son personajes grises, no son perfectos y cometen fallos, o su personalidad o forma de vida les hace cometer actos incorrectos. Hay algo sobre el final del libro que nunca podré perdonar a uno de los personajes, pero por su personalidad está totalmente justificado que actúe así, "El fin justifica los medios", y lo maravilloso es eso, que sean personajes con los que no toda la gente conectemos, pero sí podemos entender por qué hace lo que hace en base a su historia y personalidad.
Decir también que cuenta con representación LGTB tratada de manera muy sana.
Y el final te deja con muchas ganas de más. Leed esta obra, yo esperaré la segunda parte con ganas.
Es una historia con un ritmo muy rápido, con muchísima acción y que te engancha casi desde el principio.
Las pegas que tiene para mí son que en un momento dado se usa un recurso para hacer avanzar la trama que creo que no es necesario y que hay una parte concreta hacia el final que se cuenta en lugar de narrarla y me hubiera gustado «vivirla».
La prota me cae mal (ya sabemos que lo de las protas no es lo mío) aunque es algo personal y no hizo que disfrutara menos del libro ni me enganchara menos, eso sí, me moría de ganas de meterme en las páginas y darle una colleja a ver si espabilaba.
Los personajes están TODOS super bien definidos y ninguno te deja indiferente; se ven diversas evoluciones en ellos incluso pasando por las mismas vivencias y también en las relaciones entre todos. Incluso tus lealtades como lector llegan a cambiar a lo largo de la historia.
Si os gustan las distopías y los libros con acción, MUY RECOMENDADO; además, la autora es la reina del cliffhanger.
Hacía mucho tiempo desde la última vez que había leído un libro de este género, y lo he disfrutado mucho. Es una historia narrada en primera persona, y la evolución del personaje principal es muy natural y bien desarrollada. ¡Una lectura amena y rápida que deja ganas de más!
Hacía mucho tiempo que no me adentraba en el mundo de las distopía, y qué mejor manera que hacerlo con una historia nueva y original. ¡Recordad leer la sinopsis!
La trama comienza muy fuerte y conectándonos de forma directa con el mundo y con la situación actual de la protagonista. La introducción me ha encantado, y he quedado maravillada con el característico sistema de organización que ha creado la autora. Quizás se me ha hecho muy cuesta arriba cierta parte de la novela que es un punto de inflexión entre el pasado y el futuro de la protagonista, aunque es necesario ese pequeño parón en los acontecimientos, ya que sin dicha parte nada de lo que sucede a posteriori tendría sentido. Por lo demás, todo ha sido una novela llena de emociones y sentimientos.
El ritmo de lectura es ágil, por eso la novela se lee en un suspiro. Con respecto a la ambientación, nos hacemos una idea general del escenario, aunque algunas escenas tienen mejores descripciones que otras.
Hay una infinidad de giros argumentales en esta historia, detalle que me parece genial, ya que en ningún momento puedes predecir en qué línea van a seguir los sucesos (y ya sabéis que esto me encanta).
Por otro lado, también he quedado maravillada con el desenlace que da pie a la segunda parte de esta bilogía, la cual parece ser que seguirá llena de acción, drama y aventuras.
La protagonista de esta novela, Katerina, me ha convencido. Es cierto que a veces no toma las mejores decisiones de su vida, pero esto esto lo que pasa cuando la vida no te ayuda en nada y solo hace oprimir todos tus planes; Katerina lucha una batalla a contrarreloj por su supervivencia. Además, es una persona muy fuerte, decidida y a su vez muy humana y con sentimientos que no duda en mostrar.
Hay un chico que entra en la vida de Katerina que, si bien no es un mal personaje (de hecho, tiene una curiosa evolución), no he logrado conectar con su forma de ver la vida; me ha desesperado mucho. Hay algunos personajes secundarios que son muy relevantes e interesantes, pero que se quedan en pequeñas pinceladas porque no logramos adivinar su carácter real o su verdadera misión en esta historia. Cumplen la función de motivar las decisiones de la protagonista, pero me han dejado con ganas de más. En general, todos los personajes de esta novela se van desarrollando de forma paulatina; sin prisa pero sin pausa.
Uno de los puntos más fuertes de este libro es la pluma de la autora, de verdad, me enamoró desde la primera página. Su estilo narrativo es ameno y atrapante. Además, su forma de expresarse es clara y concisa.
Eslabón es una distopía que promete mucha acción y aventuras. La protagonista nos muestra que no siempre la vida nos lleva por el camino que queremos, pero que podemos luchar con todo los obstáculos si nos lo proponemos.
“Eslabón” es la primera parte de una distopía juvenil al estilo Divergente o Los juegos del hambre. Con una sociedad muy bien construida que se nos va presentando poco a poco, donde unos pocos viven como reyes creyéndose con el derecho de destrozar la vida de aquellos a los que usan como esclavos.
El tinte juvenil se ve reflejado, principalmente, en las actitudes de los personajes un pelín exageradas en algunos momentos. De hecho debo admitir que he tenido mayor conexión con los personajes secundarios, en su mayoría muy carismáticos y con una magnífica construcción, que no con los protagonistas.
Estamos ante un libro que no deja lugar para el aburrimiento. Encadenando acción tras acción mantiene al lector en un estado de tensión constante que te insta a no soltar el libro hasta llegar al final (aquí una servidora se lo leyó en un solo día).
La historia contiene bastante romance. Un romance un poco forzado en mi opinión, pero que probablemente sea del agrado de aquellos lectores más acostumbrados a leer historias con relaciones algo complicadas. Aun así, reconozco que tampoco es algo que me haya resultado molesto ni desagradable. Las relaciones románticas no llegan a entorpecer ni opacar la trama, por lo que son tolerables incluso para aquellos a los que no nos gustan demasiado este tipo de escenas.
En definitiva es una gran lectura para aquellos a los que, como a mí, les gusten las historias en las que los protagonistas tienen que pasar pruebas y superar obstáculos para labrarse un futuro. Una de esas historias en las que los personajes evolucionan a raíz del sufrimiento, en la que deben echar mano de su espíritu de superación para lograr sobrevivir. Y si encima sois de los que os gusta que las novelas contengan un poco de romance, ¡tanto mejor!
-¿Tu honor tiene precio? -Sí. Espero que el tuyo no lo tenga nunca.
¡Me ha gustado bastante! Tiene efecto bola de nieve: al principio es algo pequeño que va cobrando fuerza hasta convertirse en un alud. Es cierto que al empezarlo estaba un poco confundida y me parecía que todo iba demasiado rápido, pero es que también he agradecido la trama tan ágil porque no podía parar de leer. El mundo distopico que nos presentan es interesante y espero que se ahonde más en él en la segunda parte, así como en el meollo político (el tema de la religión me causa INTRIGA). Por otro lado: los personajes. Ginebra es mi fav y agradezco los tonos grises de Alec y May (aunque esta última ufffff). Y he leído muchas reseñas que mencionan que Katerina es insoportable, pero a mi no me ha caído mal, de hecho agradezco la evolución que tiene en el libro. Pasa de ser una esclava a la que ha sido arrancada de todo lo que le es conocido hasta ir adaptándose a las nuevas circunstancias de su vida. Me gustan las historias de chicas perdidas que se van haciendo fuertes a base de hostias. Sus acciones son muy acordes a lo que vive asi que me gusta por el realismo que destila. ¡Y eso es todo! El cliffhanger es de infarto y estoy deseando ver cómo se van a desenvolver las cosas en el segundo libro. P.D: Jordan es un creepy de cojones, espero que le den 282828299292 puñaladas en la tráquea.
No ha sido lo que esperaba. El principio me llamó mucho la atención e incluso me recordó un poco a El cuento de la criada. Sin embargo, pasados los dos o tres primeros capítulos, en mi opinión, cae en picado. Es cierto que en cuanto a acción es un no parar, pero me han faltado muchísimas cosas para poder decir que me gusta el libro. Los personajes no tienen profundidad y las relaciones entre ellos tampoco me han parecido muy trabajadas porque siento que me han contado las cosas muy por encima. Muy tell en lugar de show. No he logrado empatizar con ninguno, así que me ha resultado unnpoco indiferente casi todo lo que ha sucedido a lo largo de la historia. Y es una pena porque creo que la idea no es mala, aunque la ejecución es bastante mejorable. Es cierto que el final te abre una puerta muy interesante y si continúo con la biología será por mera curiosidad, pero no me ha encandilado como para necesitar la segunda parte.
En cuanto a estilo de escritura tampoco me ha convencido nada. Más que nada, y entre otras cosas, porque nueve de cada diez adjetivos están puestos antes del sustantivo y eso es más común en el inglés. No es que esté mal, ni mucho menos, pero en mi opinión enlentece el ritmo y le resta naturalidad a la narración.
Se me ha pasado volando este libro, y eso que son un poco más de 400 palabras (que no las aparenta porque el papel que usa Hela ??? super fino y super suave, lo estuve acariciando un rato cuando me llegó, así como dato random), pero tiene mucha acción que lo convierte en una lectura rápida y ágil. Había oído comentarios de que la protagonista no cae bien o que es un poco petarda, y eso me daba un poco de miedo, pero no he tenido problemas en la lectura para nada. A veces es un poco sansela, pero es que con todo lo que pasa la pobre... Una detrás de otra. Quizá la pega que le sacaría es que, para ser distopía, parece que el elemento social queda un poco al margen de la burbuja de la acción principal. Además, con el último capítulo y el epílogo te quedas con la sensación de que solo has visto el principio de algo más grande. Es un final que pone el listón muy alto a las expectativas para su segunda parte.
Eslabón es la primera novela de una bilogía distópica muy interesante. En su debut como escritora, Lucía G. Sobrado ha construido una historia que no podrás soltar con sus cliffhangers ni tampoco por los diferentes personajes que van apareciendo en escena.
Nos ha gustado. Es una novela 100% recomendada si te gustan las distopías con acción, peleas y, en general, bastante violencia. Se te va a pasar la novela volando. El estilo de escritura de la autora es buenísimo, muy ágil. Se expresa muy bien. Si queréis leer la reseña entera, os redirigimos a: https://librosparados.home.blog/2020/...
He disfrutado mucho de esta lectura. Es uno de esos libros que no puedes parar de leer porque está lleno de acción e intriga. Los personajes me han encantado así como las diferentes relaciones que nacen entre ellos.
Echaba de menos leer una distopía que me atrapase como lo ha hecho Eslabón, con su mundo repartidos en sectores, su jerarquía de libres, dominus y esclavos, y la tensión que caracteriza cada escena que Lucía ha escrito.
La protagonista de esta historia es Katerina, una esclava que vive junto con su madres y otros esclavos en la casa de un dominus. La vida de Katerina se trunca el día que Jordan, el hijo del dominus, decide "comprarla" para sí mismo. En otras circunstancias, quizás habría sido incluso un halago para un esclavo, pero para Katerina es la peor de las sentencias. Su mejor amigo y amor de la infancia, Jhon, es quien la ayuda a salir corriendo de la casa. Ninguno de los dos iba a imaginar que Jordan se cobraría esa traición de la peor manera de posible. A partir de entonces, Kat y Jhon se ven obligados a salir de sector Gamma, donde viven, y buscarse la vida lejos de Jordan y su familia. Por el camino conocerán a May y a Alec, que ocultan mucho más de lo que podríamos imaginar. Viviremos de cerca las emociones de Kat al hacerse amiga de Gabriella y Patrick, al enfrentarse a la muerte y al dolor, y al asumir que su papel en este mundo es sobrevivir como eslabón.
Los personajes son un auténtico regalo, tan diferentes los unos de los otros que es fácil seguir sus conversaciones. Katerina es muy resiliente, a pesar de las dificultades a las que se enfrenta. Alec es reservado y oscuro; Jhon es dulce y atento; Gabriella otorga el punto de humor a la historia; nunca sabes por dónde te va a salir May... Incluso los personajes más secundarios, como Iria, tienen su importancia en la novela. Que cada uno aporte algo distinto es lo que más me ha gustado, y estoy deseando tener un poquito más de ellos en Cadenas, la segunda parte.
Respecto a la pluma de Lucía, es adictiva. Enlaza una idea con otra sin que te des cuenta. Plasma los sentimientos de resignación y tristeza de una forma que es imposible no sentirte identificado/a con ellos en alguna ocasión. Porque la protagonista, Katerina, es tan humana como nosotros/as. Lucía ha creado un mundo complejo, lleno de reglas y secretos que vamos descubriendo poco a poco. Se degusta el ambiente distópico igual que cuando probamos nuestra comida favorita. Eslabón me atrae de la misma manera que lo hicieron Mentes poderosas o Los Juegos del Hambre.
En definitiva, si os gustan las novelas en las que el prota sufre, la trama es compleja y se respira ciencia ficción y distopía en cada página, esta es vuestra historia.
Reseña completa aquí Tenía un montón de ganas de leer este libro porque siempre he sido muy fan de las distopías. Empecé leyendo juvenil gracias a Los juegos del hambre y hacía mucho tiempo que no leía un libro de este género, así que la lectura conjunta que organizo para la editorial era el momento oportuno. También tenía muchas ganas de leer a la autora, pero la verdad es que me ha decepcionado bastante este libro y no me ha terminado de convencer. Aunque no descarto leer su segunda parte porque el final me ha dejado con la boca abierta.
Katerina trabaja para su dominus como esclava en Sector Gamma. Cuando el hijo de la casa cumple dieciocho años, la reclama como su esclava, pero una serie de acontecimientos hará que huya de allí junto a John, otro esclavo de la casa. sangre de vez en cuando para que los mordedores puedan seguir aprovechándose de la humanidad. En Sector Delta las cosas no mejoran, John tendrá que combatir en peleas de boxeo para que ambos puedan sobrevivir. Allí Katerina conocerá a Alec y May, dos misteriosos jóvenes que le demostrarán ser más de lo que aparentan, para bien y para mal.
Para que os hagáis una idea, Eslabón es un poco una mezcla de la trilogía de Los juegos del hambre con Divergente. El mundo que ha creado la autora es una pasada y me ha parecido interesante, solo que esperaba un mayor desarrollo, que espero que se dé en la segunda parte. Conoceremos todo el mundo desde la perspectiva de Katerina en primera persona de presente, no suelo ser muy participe de las narraciones así, pero en este caso creo que es lo ideal para que la historia avance con ritmo. Aunque ha habido un par de cosas que no me han terminado de gustar: los adjetivos antes que sustantivos, un capítulo (solo uno) desde el punto de vista de otro personaje, mezclar tiempos verbales de presente con pasado, una escena de acción contada con cuenta gotas...
La historia me ha enganchado desde el primer capítulo y me ha gustado especialmente la sociedad distópica creada y como vamos conociendo poco a poco junto a Katerina como funciona su mundo y las diferencias tan abismales que hay entre los distintos estratos de la sociedad. Me hubiera gustado mucho conocer más a fondo esa sociedad, me he quedado con muchas dudas.
Los principales personajes me han parecido bastante complejos teniendo en cuenta que todo lo que sabemos de ellos es a partir de sus acciones y la percepción de la protagonista sobre ellos. Alec me parece un personaje muy interesante y me gustaría conocerlo más.
Habrá quien piense que Katerina es un personaje simplón porque siempre está esperando para ver por donde le viene el viento, no lo considero así, es alguien que no conoce absolutamente nada de la sociedad fuera de la burbuja en la que siempre ha vivido y se adapta como puede, tiene mucha fuerza de voluntad.
Me encanta como Lucia describe las acciones y el entorno, produce que te metas en ese escenario y sientas lo que la protagonista está sintiendo, ya sea una escena de lucha o un momento más íntimo.
Tanto el final del último capítulo como el epílogo hacen desear leer más.
Impredecible, sin pelos en la lengua, y con un desarrollo tan natural como adrenalínico e inesperado. Una historia que cumple todo lo que promete, pero de formas sorprendentes para que no bajes la guardia ni un instante en un mundo donde todavía falta para lograr romper las cadenas.
Adoro que desde el panorama nacional tengamos asombrosas propuestas dentro del sector de las distopías como esta bilogía, Rebelión roja, La rebelión de la mariposa o Promesas de acero; nos muestran que esta clase de historias tienen todavía mucho que ofrecer y que nosotros podremos gozar con ellas mucho más tiempo tras el boom de las distopías en la década anterior.
Si eres fan de las distopías juveniles y te gustó Los juegos del hambre, te encantará. Lucía escribe muy bien, la historia engancha, los personajes están muy cuidados y ha conseguido en esta novela que no pueda parar de leerlo hasta el final. Ahora a por el segundo.