Según cómo lo veo hoy, lo que hace a un gran artista no es su nivel de perfección, sino su nivel de honestidad. Aquel artista que puede aceptar el arte como un proceso inter-siglos, del cual él no es más que un error necesario. Necesario para que el proceso se mantenga vivo. Pretender la perfección sería frenar el proceso, intentar concluirlo, matarlo.
Published on October 24, 2010 11:17