ENRAIZÁNDOSE EN EL LIBRE ALBEDRÍO

RESEÑA: ATANDO CABOS – E. ANNIE PROULX


En esta novela, publicada en 1993, se ha utilizado con gran maestría la exageración y el humor negro para conseguir unos personajes peculiares, excéntricos, conmovedores y hasta trágicos. Muchos consideran que el personaje de Quoley, el protagonista, es exagerado, exacerbado, un tipo de personaje que no podría existir en la vida real, el prototipo del perdedor. Y sin embargo, es un personaje creíble, creíble en su evolución, que acaba aprendiendo de sus errores. Porque en el fondo, Atando cabos es una historia costumbrista, de segundas oportunidades. Pero más que de exageración, yo hablaría de lo rocambolesco, de lo que casi roza lo inverosímil pero no llega a alcanzarlo del todo.


[image error]

Atando cabos
E. Annie Proulx
1995, Tusquets
Trad. Mariano Antolín Rato




E. Annie Proulx, conocida también por una narración corta que más tarde fue llevada al cine como Brokeback Mountain, es una de las autoras más leídas de USA y ha recibido algunos de los premios literarios más prestigiosos de su país. Muchos han etiquetado su estilo como realismo mágico. Y efectivamente, el realismo mágico impregna toda la novela con gran sutileza y, al mismo tiempo, aprovecha para abordar también sutilmente todo tipo de temas de denuncia, como la mala gestión de un territorio, los abusos sexuales y el tratamiento que se hace de ellos en los medios o los desastres ecológicos…

El mismo paisaje es como un personaje más, preñado de extremos meteorológicos y geológicos, tan hermoso como aparentemente duro e inhóspito, que en el fondo no consigue determinar ni doblegar a aquellos de sus habitantes que persisten en enraizarse en él, de la misma manera que uno se enraiza en el libre albedrío.


Autor reseña: Maite Mateos

 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on January 12, 2020 10:00
No comments have been added yet.