PFQMG - Cap. 14 - Cómo supe que eras malvada
Rita
—¿Ya terminaste? —le pregunto a Key, tocando suavemente la puerta del baño en donde lleva más de cinco minutos encerrado.¿Qué tanto puede orinar una persona?—Rita —murmura él—. No puedo hacerlo cuando sé que estás al otro lado de la puerta, escuchando todo. Aléjate, dame mi espacio.—¿Estás orinando en el jarrón que te di? Recuerda no botar nada, cada gota cuenta.Escucho casi al instante cómo comienza a subirse el cierre del pantalón. Luego sus pies se arrastran por el suelo y abre la puerta.—Toma, esto es todo lo que pude recolectar.Para mi desgracia me muestra el jarrón que acabo de darle hace unos momentos atrás, ésta vez contiene una sustancia líquida amarilla.Arrugo la cara y me alejo todo lo que puedo.—Aquí está —insiste él—. Tómalo.Niego con la cabeza.—No lo quiero tocar. Y oye, ¿por qué no está lleno? Pensé que tomaste bastante líquido como para poder cumplir esta venganza.—¿Qué clase de persona crees que soy? Es imposible orinar tanto. ¿Lo tomas o lo dejas?Hago una mueca de asco.—Perfecto —murmuro—. Lo tomo. Pero tú lo sostienes.—Bien. ¿Por dónde empezamos?Le hago una señal para que me siga por la habitación y nos detenemos ante la cama.
Key
Estoy de pie fuera de la cabaña del ex novio de Rita. Observando el reloj en mi mano izquierda, suspirando cuando veo que han pasado más de cinco minutos y Rita no sale del lugar.No debería preocuparme por ella, pero tampoco quiero que se quede durante todo el acto de la infiel pareja. Incluso llego a considerar seriamente llamar a la puerta y distraer a Gabriel por mí mismo, pero mi plan se esfuma cuando observo a una Rita muy emocionada salir de la puerta principal, corriendo como alma en pena.—Rita, ¿qué…?Ella casi no me nota en su prisa por salir huyendo, pero se detiene al escucharme.—¡Corre, Key! —grita, dejándome atrás.Por alguna razón hago lo que me dice y me encuentro corriendo detrás de ella. La alcanzo rápidamente y ahora estoy corriendo a la par.Atrás escucho la voz de Gabriel. Cuando me giro para ver cuánta distancia le llevamos, noto que lleva un pantalón mal arreglado, con una gran y enorme mancha en la entrepierna.—Rita, ¿qué hiciste? —grito, jadeando.Ella no contesta, pero en cambio corre con mayor velocidad que la de antes.Cuando estamos a punto de llegar al final del camino empedrado, la tomo del brazo y la llevo hacia un lado, introduciéndonos por una parte del bosque que sé que el chico heterocromático no conoce.Pronto perdemos a Gabriel y nos detenemos después de haber cruzado por todo el campamento, chocando con gente que se dirigía a la fogata.—Me puedes… —respiro hondo—explicar… ¿qué… sucede?Me doblo sobre mi estómago, apoyando mis palmas sobre mis rodillas.Rita está jadeando por aire, ambos cansados.—Le tomé una foto cuando estaba en la cama con la chica —dice ella finalmente, tragando saliva—. Aún conservo el número de teléfono de mi ex mejor amiga.—¿Se la vas a enviar?—Claro —dice ella, encogiéndose de hombros. Ambos recuperamos el aliento y soltamos un último suspiro profundo.Un mechón oscuro de su pelo se pega en su mejilla. Ella ríe mientras saca su teléfono del bolsillo y comienza a mostrarme las imágenes capturadas.—Rita, eres extremadamente malvada. Pero el tipo se lo merece —le digo.—A esto llamo yo karma —murmura ella, limpiándose el sudor de su frente.—¿Por qué estabas corriendo? —le pregunto—. ¿Te amenazó ese tipo?—Es probable que quiera las fotos de eliminadas. Pero jamás le daré el gusto.Caminamos de manera lenta esta vez, moviéndonos con cuidado y dirigiéndonos hacia donde el resto de mi familia se encuentra. Gabriel evitaría hacer una escena que involucre a los dueños de su trasero. Sin mi familia no habría paga para él.—Oye, ¿me puedes explicar que era esa enorme mancha en el pantalón que usaba tu ex? —comento con curiosidad.—Creo que ya sabes qué es.—Tengo mis sospechas pero no puedo creer que lo hicieras.—Sí, lo hice. Puse un poco de tu elixir amarillo mágico.Me rio con fuerza, como no me había reído antes.—Eso es asqueroso a un nuevo nivel —digo entre risas.Muy pronto el calor del fuego en la fogata nos golpea con fuerza en el rostro a medida que nos acercamos. La familia ya está reunida, contando historias y asando malvaviscos. Nos quedamos callados después de eso, deteniéndonos a una corta distancia antes de reunirnos con todos.Miro a Rita con detenimiento, apreciando el ambiente y sonriendo cuando mira a mis primas pequeñas correr detrás de Adam.—No sabía que las familias podían lucir así —dice ella.—¿Así, cómo?—Simplemente así de perfectas. Todos riendo y abrazándose entre sí, sentados alrededor de la fogata. Parece algo sacado de una película. Nos quedamos en silencio por unos minutos, hasta que Rita habla de nuevo.—¿Cómo fue crecer con una familia equilibrada y completa?—¿Equilibrada? —pregunto—. No somos equilibrados para nada. Ya conociste a la tía Morgan, la diosa del sexo con protección.—Para mí ustedes lucen muy normales… a excepción de tu tía, claro. Ah, y a excepción de tu abuelo el nudista.Ella señala más allá de la fogata, en donde el abuelo Johny comienza a quitarse la ropa como si estuviera en llamas y a correr en círculos.—Créeme, Rita, no lo somos. Somos un desastre y esta es la prueba de ello.Desde donde estamos vemos a mamá perseguir al abuelo para vestirlo de nuevo, ella corre detrás de él, gritándole algo acerca de su recién operada espalda.—Tienes que conocer a mi familia entonces —dice Rita con cierto aire de amargura—, no son nada normales. Les dije que iba a un campamento y solo me pidieron que les trajera recuerdos y comida. ¡Ni siquiera preguntaron con quién iba o si iba a regresar pronto! A veces siento que no me escuchan tanto como desearía.Entonces ella alza la vista, dándome toda la atención con sus ojos marrones.—Oh, perdona —comento— ¿Dijiste algo? Estaba distraído viendo al abuelo.Rita frunce el ceño y me mira como si quisiera matarme.—¡Estoy bromeando! —le digo para tranquilizarla—. Era una simple broma. Yo siempre te escucharé, Patchie. Y claro que acepto.—¿Aceptar el qué?—Me dijiste que tenía que conocer a tu familia, dime cuándo y yo voy.Ella se cruza de brazos y rueda los ojos.—No era una invitación, vaquero. Después de este campamento, y ya sabiendo que tus hermanas conocen que lo nuestro era falso, se acabarán nuestras visitas.No sé por qué, pero me duele escuchar sus palabras. Hay cierta belleza en molestar a Rita, y extrañaré mucho no hacerlo.—¿No piensas continuar con tu labor de enamorarme? —pregunto.—Nop. Enamórate de quien quieras. Enamórate de aquella que logre robarte el sueño por las noches y todos tus pensamientos por el día; o de la que haga que tu vida tenga un poquito más de sentido que, por un minuto, creas que estás soñando por la forma en la que todo encaja. Pero hay algo que sí haré: mantendré mi palabra en cuanto a la venganza contra Mia.—Mmm, ya veo. Espero enamorarme de esa persona entonces. —Y yo espero que ella se enamore de ti.Volvemos a caer en un cómodo silencio, observando a mis hermanas compartir un malvavisco asado entre ellas.—Hablando de venganzas —murmuro—, ¿vas a enviarle a tu ex mejor amiga la foto de Gabriel con la otra chica?Ella levanta su teléfono y me muestra la pantalla principal, comprobando que ya la envió.—Eres rápida —comento.—Ella ya me respondió.Ahora me muestra la respuesta que recibió: perra .l.—¿Qué significa .l.?—Significa ten un buen día, en mensaje cifrado.—Lindo.Rita se encoge de hombros.—No es algo que no haya escuchado o visto antes.—Venganza uno, cumplida —murmuro—. Ahora sí, ¿al final de la noche obtendré un beso por haber ayudado?Ella sonríe, enseñando sus dientes.—Mejor sigue esperando por ello.Con esa frase tan enigmática se aleja de mi lado y se hace espacio entre mis hermanas para comer malvaviscos asados junto con ellas.Para cuando me uno a la fogata, papá se encuentra contando su famosa historia de terror sobre una niña en un ático. Me ubico junto a Rita, pensando que hace un par de años atrás Mia y yo hacíamos lo mismo antes, cuando pensaba que nos queríamos tanto como para superar dificultades.Sacudo la cabeza y pronto lo olvido.—¿Quieres uno? —escucho preguntar a Rita.Su mano está extendida y sostiene un malvavisco realmente quemado y derretido.—¿Quemaste al pobre malvavisco?—Solo es por fuera… está delicioso por dentro. Prueba.Niego con la cabeza.—¡Vamos! Será una mordida —susurra ella.Vuelvo a negar.—Eres un aburrido.—Y tú una mentirosa. No fui el único escondiendo secretos este día, Patchie.—¿De qué hablas?—De tu teléfono, sí lo tenías contigo hoy. Tuviste valor de escribirte con Adam después de todo.—Creí que ese tema ya lo habíamos cerrado por hoy. No recuerdo haber dicho que no lo cargaba conmigo. Además, si de mentirosos hablamos, tú te llevas el premio, ¿no crees?—Mentalmente estoy rodando mis ojos —respondo.—Físicamente estoy sacando mi tercer dedo —ella lo extiende frente a mi cara para mostrarlo.—Metafísicamente hablando, me transformo en un pájaro y defeco sobre tu cabeza.—Mágicamente hablando, te transformo en una sanguijuela a ti y a las dos zorras de prostíbulo que rodean a tu amigo, y los encierro en un círculo hecho de sal para que no salgan.—Wow, eso fue extremo —digo tomando el malvavisco quemado que sigue ofreciéndome.Mastico con mucha lentitud, saboreando la parte quemada. Sabe horrible, pero me encuentro sin valor para decírselo en su cara.—¿Sabe bien? —pregunta ella, sus ojos marrones se sobresaltan con la emoción.—Es muy bueno —miento con la boca llena. Cuando mastico, el malvavisco cruje. ¿Es normal que haga eso?Rita sonríe con ganas.—Me alegra —comenta ella—. Lo encontré en el suelo y me preocupaba que se desperdiciara porque nadie lo fuera a comer.Suelto lo que queda del malvavisco quemado y comienzo a escupir con fervor.—¿Por qué me diste eso? ¿Qué pasa contigo?—Eso es por cuestionar mis palabras. Nadie se mete conmigo o duda de lo que digo, Key. Nadie.—Estás mal de la cabeza.—Lo sé. Solo quería recordártelo.—Hiciste tu punto. No pienso meterme contigo, Rita Day. Nunca.Escupo de nuevo mientras ella me da una mirada de suficiencia cuando toma otro malvavisco de su bolsa.—Mejor que así sea, Keyton. Mejor que lo sea.
Y así será.
Published on January 26, 2017 22:25
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Karla
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Jan 29, 2017 06:43PM
Escelente gracias.
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