Hugo García Michel's Blog, page 188

April 30, 2016

¡Ay, GIEI!

Se va el GIEI y tras él deja una estela de incertidumbre, desconfianza, divisiones, encono, veneno y minas explosivas. Financiado por el gobierno con 2.5 millones de dólares, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes se dedicó durante un año y medio más a torpedear a la PGR y el gobierno que a buscar el verdadero destino final de los 43 normalistas desaparecidos y casi seguramente ejecutados.
  Notoriamente preocupados por atacar la famosa “verdad histórica” del ex procurador Murillo Káram y con la obsesión de desmentir la posible quema de restos humanos en el basurero de Cocula, desde un principio resultó claro que su idea fue quedar bien con los sectores antigubernamentales y exhibir internacionalmente al Estado mexicano. No sé si esas eran las instrucciones que recibieron por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, pero mi impresión es que el GIEI no vino a esclarecer el caso Ayotzinapa (de hecho, no lo hizo), sino a crear más confusión y dar elementos a un sector de la oposición “de izquierda” (ya se sabe: la identificada con Morena, con algunos medios de comunicación y hasta con el EPR), para que continúe con sus ataques sistemáticos contra “el régimen represor”.
  Ahora que se quedó sin el jugoso presupuesto que percibía (se sabe que cada experto –cuatro abogados y un psicólogo, ninguno de ellos técnico especializado– recibió cerca de 200 mil pesos mensuales en esos 18 meses, hagamos cuentas...), el GIEI se ha vuelto más agresivo aún y acusa al gobierno de haberle puesto múltiples obstáculos, aunque no especifica uno solo de ellos, al tiempo que se hace homenajear por los padres de Ayotzinapa en una ceremonia llena de collares de flores para ellos y de invectivas para las autoridades.
  A mi modo de ver, el gobierno hizo bien en no alargar más la estancia de estos expertos que si a algo contribuyeron fue a hacer más tenso el ambiente y a no proporcionar una sola conclusión que pudiese ayudar al esclarecimiento de los hechos de Iguala y la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
  Es que la misión del GIEI era otra... y esa sí la cumplió con creces.

(Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 30, 2016 16:22

April 29, 2016

Cat Power / The Covers Record (2000)

La singular Chan Marshall, mejor conocida como Cat Power, realizó hace cinco años este álbum intensísimo, conformado por una docena de temas ajenos que recrea de manera tan austera y melancólica como visceral y sublime. De los Rolling Stones a Velvet Underground, pasando por Nina Simone y Bob Dylan. Un gran disco.

Mejor tema: “(I Can’t Get No) Satisfaction”
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 29, 2016 15:44

April 28, 2016

Cinco frases lapidarias de Emmanuel Carballo

"Decir la verdad. Sin pudor, pero con razones”.

"(En México), una gente que no tiene talento puede llegar a ser una luminaria”.

"Yo fui descubridor de Elena Garro, de Inés Arredondo, de Beatriz Espejo, de Elena Poniatowska. Yo creo que mi única equivocación fue Elena Poniatowska”.

"Salvador Novo era un Monsiváis con talento”.

"Monsiváis escribía para sus admiradores. Y sus admiradores son realmente tontos, pedantes, incultos".
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 28, 2016 12:03

April 27, 2016

El truene

Dicen los enterados que la vida privada de quien escribe en un diario no debería reflejarse ni por asomo en sus textos. Así pues, no voy a decir a mis lectores que estoy sumido en la depresión más jodida. Tampoco les contaré de mis cuitas sentimentales ni de las broncas maritales que me han conducido a un virtual callejón sin salida. Después de todo, ¿a quién le importa además de al que esto escribe y a dos que tres amistades o familiares cercanos? Hablemos en cambio de un hecho cultural cada vez más difundido en nuestra sociedad posmodernizada. Me refiero, sí, al truene.
  ¿A qué se debe que la tasa de divorcios y separaciones sea actualmente tan alta? En otros tiempos, las parejas se casaban (nada de uniones libres, por supuesto), se reproducían y morían. Poco importaba que sus integrantes llevaran una relación de perros y gatos, que se aborrecieran a muerte, que dejaran de hablarse durante años y acabaran deseando los mayores males para la contraparte. El matrimonio era una institución intocable y ¡ay! de aquél que no lo respetara. Si alguien cometía la fatal osadía de divorciarse, era de inmediato tildado de pecador y hereje. La parentela le retiraba la palabra y lo condenaba al ostracismo y la soledad más terribles. Pero eran, como dije, otros tiempos.
  Hoy la cosa es distinta y no tiene caso entrar en detalles por todos sabidos. ¿Quién no ha vivido un truene? Es la cosa más normal, más común y corriente. Le sucede a cualquiera, no es algo del otro mundo. ¿Que tu mujer (o tu hombre) te estuvo viendo la cara durante años sin que te dieras maldita cuenta? ¡Hombre (o mujer), no hay que hacer una tormenta en un vaso de agua! ¿Que anduvo con otros(as) en tanto tú confiabas absolutamente en su fidelidad? Pecata minuta, camarada. A final de cuentas, existen cosas más importantes en este mundo que la separación de una pareja. Hay gente que lleva hasta cuatro o cinco divorcios, ¿y tú te amargas por uno? Es el truene, maestro; un hecho cultural típico de este fin de siglo tan yupi y tan posmo. Es más, la categoría de divorciado te da cierta distinción, un aire interesante que puedes usar para nuevos ligues y, claro, nuevos truenes. O como dice la canción de Bobby McFerrin que tanto gusta a los young urban professionals de aquí y de acullá: don't worry, be happy.

(Publicado originalmente el 7 de mayo de 1992 en mi columna "Bajo presupuesto" de la sección cultural de El Financiero)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 27, 2016 15:00

April 26, 2016

Prince, eclecticismo y Vive Latino

Quizá tardemos un tiempo en aquilatar la pérdida que para la música representa la reciente muerte de Prince. No era un artista tan popular como David Bowie y su ostracismo y su extraño carácter hicieron que su obra fuese mucho menos conocida que la del británico. Sin embargo, lo que hizo el nacido en Minneapolis no desmerece en absoluto si lo comparamos con la obra del creador de Ziggy Stardust.
  En el caso de Prince, eclecticismo es el nombre del juego. Un eclecticismo virtuoso que lo hizo experimentar de manera constante con los más diversos géneros, desde el rock puro y el blues, hasta el jazz y el soul más sofisticados; desde el folk tradicional hasta el avant-garde, pasando por el rhythm n’ blues, el funk, el pop y el hip-hop. El hombre logró fusionar todos esos estilos y proponer una música que llevaba su marca, música para nada sencilla, sobre todo la que produjo luego de su paso por la fama cuasi popera a principios de los años ochenta del siglo pasado.
  Fusión y pasión, pero con conocimiento de causa. Sin promiscuidades oligofrénicas. Con ideas propias. Con sentido de individualidad e independencia (para no hablar de la independencia por la que luchó hasta liberarse de las disqueras trasnacionales y consolidar su propio sello).
  Contrasta este sentido del eclecticismo y la fusión con la ensalada empalagosa, pesada e indigesta en que se ha convertido el festival Vive Latino, muestra anual del estado en que se encuentra el rock que se mal hace y de deshace en México. Ahí, el supuesto eclecticismo resulta barato y falso y la fusión que se propone es una horrenda mescolanza de cumbias, boleros, reggaetón, música grupera, mariachi y pop desganado y hueco. Promiscuidad absoluta, incapaz de incorporar géneros, pero que es aceptada por un público complaciente que aguarda cada año, con ansias incomprensibles, la celebración de este malhadado “evento”.
  Prince sabía lo que eran las fusiones eclécticas y las elevó a la altura del arte. Lo que se escucha en el “Vive” es la burda representación de lo mal que se encuentra ese rockcito, ahora transformado en popcitito. Una murga,

(Publicado hoy martes en mi columna "Gajes del orificio" de la sección ¡hey! de Milenio Diario)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 26, 2016 20:00

April 25, 2016

Algo que escribí ayer en facebook

La verdad es que esta ha sido una semana fantástica como pocas, llena de momentos mágicos, felices, emocionantes, divertidos y hasta alucinantes. Se lo debo sobre todo a tres personas maravillosas (del sexo femenino, aclaro; una de ellas, de hecho, acudió a la marcha de hoy y quizás otra también). La semana que viene luce de nueva cuenta muy prometedora y eso sin duda es muy bueno.
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 25, 2016 18:00

April 24, 2016

The Who by Numbers

He aquí la primera obra confesional de Pete Townshend con los Who. Dos años después de Quadrophenia, el grupo presentó este trabajo mucho más austero, mucho menos ambicioso y, quizá por ello, uno de los más sinceros e interiormente desgarrados de su discografía.   The Who by Numbers (1975) es ante todo el ejercicio de introspección de un creador que acaba de pasar por una serie de vicisitudes existenciales y que necesita exponerlas a corazón abierto. De ahí que haya composiciones que hablan sobre la relación de Townshend con las mujeres (“Dreaming from the Waist”, “They Are All in Love”), con el alcoholismo (“However Much I Booze”) y con su propia vida (“Imagine a Man”, “How Many Friends”). No se crea sin embargo que el disco resulta sombrío y depresivo. La música se encarga de llevarnos a otras dimensiones, incluyendo las de la alegría y la dulzura. De ahí la presencia de temas como “Squeeze Box”, “Blue, Red and Grey”, “Slip Kid” y la única canción de John Entwistle: la sólida y burlonamente contradictoria “Success Story”. Un álbum estupendo, entrañable, mucho mejor de lo que algunos creen, con portada dibujada por el propio Entwistle.
(Reseña que escribí originalmente para el Especial de La Mosca en la Pared No, 11, dedicado a The Who y publicado en marzo de 2008)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 24, 2016 11:37

April 23, 2016

Prince, la mota y la amapola

Murió Prince y con él sigue la mala racha que en este 2016 se ha llevado a algunos grandes de la historia del rock. Ello en el entorno de la intervención del presidente Peña Nieto en la Asamblea General de la ONU sobre Drogas, una intervención que quizá no sea del todo satisfactoria al quedarse corta en algunos aspectos, pero que, de cualquier modo, representa un gran paso en la ultraconservadora postura que hasta ahora había mantenido México en este tema.
  Estupendo que se haya reconocido que la malhadada guerra contra las drogas ha sido inútil para inhibir la producción, el tráfico y el consumo mundial de estupefacientes. Magnífico que se proponga modificar el marco normativo en el país a fin de aumentar la cantidad establecida para el consumo personal de marihuana, al tiempo que se apuesta por efectuar grandes campañas de prevención. Espléndido que sea prácticamente un hecho la autorización oficial para el uso de esa yerba con fines medicinales y terapéuticos. Enhorabuena por el cambio de actitud y por haber acudido a presentarlo en ese foro mundial, cuando en un principio se había dicho que el primer mandatario no acudiría al mismo.
  Claro que aún faltan más puntos por resolver en el caso de la famosa mota, pero estos pasos hacia adelante hasta hace poco hubiesen sido impensables. Ahora habría que abrir camino a la discusión sobre la propuesta de reglamentar el cultivo de amapola también con fines médicos, para que las zonas de cultivo (por ejemplo en Iguala) la sigan cosechando pero con fines exclusivamente relacionados con el alivio del dolor en diversas enfermedades terminales (léase el indispensable texto “El derecho a la amapola” de Saúl López Noriega que aparece en la revista Nexos de este mes).
  De los posibles precandidatos a las elecciones presidenciales del 2018, sólo el priista Miguel Ángel Osorio Chong ha mostrado una posición (bastante positiva y progresista) sobre el tema de las drogas. ¿Y los otros dónde están? ¿Qué esperan para pronunciarse al respecto. No los he escuchado decir ni pío.
  “Todo tiene su lado oscuro”, dijo alguna vez Prince. En el caso de las drogas, puede tener su lado luminoso.

(Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 23, 2016 16:00

April 21, 2016

El papucho Colón

(El siguiente texto llegó extrañamente a nuestras manos y al parecer fue extraído en forma clandestina de la redacción de la revista Eres. Desconocemos a la autora del mismo).
¡Suertuda! Así me calificaron todos los que supieron que pude entrevistar al papucho de papuchos, al galán más popular del momento, al guapérrimo italiano que rompe los corazones de... ¡todas! ¿Se imaginan? El sueño de miles de chicas fue para mí una realidad, como si fuera yo uno de los personajes de la Isla de la Fantasía. Ay, no saben, pero la cosa estuvo ¡super! y todavía nolopuedocreer. Cómo llegué hasta él es un secretito que no voy a contar (absténganse, chismositos), Básteles saber que hablé con él en una lujosísima suite del mejor hotel de Cancún. Ahí estaba, chulísimo, con la piel dorada y la blonda melena cuidadosamente despeinada. Tenía un look padrísimo, hagan de cuenta Laureano Brizuela (¡guau!), pero con un aire mediterráneo y unos ojazos azules que para qué les cuento, ¡casi perfecto!   No podía desperdiciar la oportunidad de entrevistarlo, a pesar de que tan sólo verlo me causaba unas ñáñaras ¡tremendas! Con decirles que hasta ganas me dieron de hacer pipí (pero me aguanté). Por fin, después de 500 años, él concedía una interviú a un medio de comunicación "y cuál mejor que Eres", me comentó con una sonrisa ensoñadora y divina. Así pues, encendí mi grabadora y bien prendida (yo) me dispuse a confesar al genovés más famoso del mundo: el rorro Cristóbal Colón.   "Antes que nada agradezco esta oportunidad de expresarme directamente, porque se ha dicho muchas cosas de mí que no merezco", declaró con su coqueto acento entre italiano y gallego. Y continuó: "Apenas el pasado día 12, muchos me agarraron de su puerquito. A mi pobre estatua la escupieron, la pintarrajearon, le cortaron un dedo y hasta le pintaron un letrero confundiéndome con el baturro de Hernán Cortés, ¡no hay derecho!". Como no era eso lo que nos interesaba saber, fuimos directo al grano: ¿Es cierto que te vas a retirar? Su respuesta fue. contundente: "Sí, pienso cambiar de rubro. Ya hablé con Ernesto Alonso para estelarizar una telenovela que se va a llamar "Muchacho italiano viene a quedarse", en la que compartiré estelares con Biby Gaytán y Paco Stanley. Yo quería que mi galán fuera Luismi, pero no se pudo".   ¿Es cierto que tronaste con Isabel? "Bueno, es que Fernando era muy celoso y se enojó cuando ella me regaló sus joyas. Y peor cuando supo que me fui de juerga con los hermanos Pinzón. Pero la recuerdo con cariño y de vez en cuando nos hablamos por el celular. ¡Besitos para mi reinita!".   Se dice que serás el invitado en el último programa de Y Vero América va... "Chance y sí, sobre todo si Juanga los deja colgados. Yo a la Veros la quiero mucho. Es bien ingeniosa y pícara. También voy a estar con mi cuate Raúl Velasco en Siempre en Domingo, donde haré mi debut como cantante de ópera-rap. Tú sabes, una mezcla de Verdi con MC Hammer Ya lo verán. Es una sorpresota".   La entrevista terminó súbitamente cuando el representante de Cris (ése será su nombre artístico) llegó a avisar que el tiempo había terminado, pero él tuvo el detalle de despedirse de sus fans: "Adoro a los mexicanos y sobre todo a las mexicanas. México es como mi segunda patria. ¡Los amo..!".
(Texto publicado el jueves 15 de octubre de 1992 en mi columna "Bajo presupuesto" de la sección cultural de El Financiero)
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 21, 2016 18:29

April 20, 2016

Un gran disco poco conocido de Bob Dylan

De algún modo ligado a John Wesley Harding y Nashville Skyline, New Morning (1970) se diferencia en un hecho fundamental: la recuperación del espíritu rocanrolero, enriquecido con elementos del jazz (“Sign on the Window”, “Winterlude”) y hasta de una especie de vocalización prehiphopera (“If Dogs Run Free”). Sin embargo, el tema más trascendente es la dulce y muy bella “If Not for You”, la cual algunos afirman fue compuesta por Dylan junto con su gran amigo George Harrison. Si esto es o no verdadero, lo cierto es que la canción fue incluida primeramente en el álbum triple All Things Must Pass del ex beatle.
  Otros cortes notable de este Nueva mañana son el bucólico y sencillamente elegiaco “New Morning”, el finísimamente machista (en serio) “The Man in Me” y el conmovedor “Father of Night”. Un tema cuando menos curioso es “Went to See the Gypsy”, aparente homenaje (¿o antihomenaje?) a Elvis Presley.

 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on April 20, 2016 12:27

Hugo García Michel's Blog

Hugo García Michel
Hugo García Michel isn't a Goodreads Author (yet), but they do have a blog, so here are some recent posts imported from their feed.
Follow Hugo García Michel's blog with rss.